2016 en 12 noticias de moda que cambiarán 2017

- El año del veo ahora-compro ahora. El año en el que la pasarela se adaptó definitivamente al cambio, o se posicionó definitivamente en contra. Si bien las Semanas de la Moda de Milán y Paris se muestran todavía recelosas ante este sistema la mayoría de diseñadores de Nueva York y Londres ya han adaptado el modelo. De Tommy Hilfiger a Alexander Wang pasando por Tom Ford, Michael Kors, Rebecca Minkoff, Burberry o TopShop.

- El año de las idas y venidas infinitas. 2016 fue el año en el que Raf Simons se marchó a Calvin Klein tras la salida de Francisco Costa (e Italo Zucchelli) y le cedió su puesto en Dior a Maria Grazia Chiuri, la mitad de Valentino. También ha sido el año en el que Hedi Slimane dejaba Saint Laurent - con querella de por medio- pasándole el testigo a Anthony Vaccarello; y ya que estamos metidos en temas legales, en 2016 hemos visto como Carolina Herrera llevaba a Oscar de la Renta a los tribunales a propósito de Laura Kim, nueva directora creativa de la firma junto a Fernando Garcia (y antes consultora para Herrera). En 2016 Roberto Cavalli se quedaba sin Peter Dundas; Carven sin Alexis Martial y Adrien Caillaudaud; DKNY sin Dao-Yi Chow y Maxwell Osbourne así como Tod's sin Alessandra Fachinetti, Salvatore Ferragamo sin Massimo Giorgetti, y Berluti, sin Brendan Mullan y su sucesor por poco más de cinco minutos: Justin O'Shea. Por otro lado Consuelo Castiglioni abandonaba Marni y Jonathan Saunders aparcaba definitivamente su línea homónima para incorporarse a Diane Von Furstenberg mientras Bouchra Jarrar tomaba las riendas de Lanvin.

- El año que que cayó Nasty Gal. Sophia Amoruso pasaba de estar al frente de una de las empresas de moda online con más proyección del momento (hasta darse de bruces con los problemas financieros crecía un 500% al año), sacar su segundo libro y vender los derechos de su historia personal -basada en su primer bestseller: Girlboss- a Netflix, para convertir su biografía en serie, a declararse en bancarrota. 2017 puede ser el año en el que el retailer inglés con sede en Manchester Boohoo se haga con el fallido negocio.

- El año del merchandising musical hecho tendencia (de lujo). En 2016 la típica ropa promocional de conciertos se ha convertido en la tendencia más cool y rentable de la industria de la moda. Así lo ha demostrado el merchandising a precios de firma de lujo de las giras de Kanye West, Justin Bieber (además de sus múltiples licencias lanzaba una línea exclusiva para Barney's) o Rihanna.

- El año de las microcolaboraciones. 2016 ha demostrado que la colaboración más rentable es aquella limitada, exclusiva y de la mano de una plataforma online. Este año han triunfado las asociaciones entre grandes marcas y webs como Net-a-porter (a propósito de Gucci o Jacquemus), MatchesFashion (con Vetements) o Aquazzura con MyTheresa y Farftech, entre muchas otras (como Coach y Colette, o lo de Jean Paul Gaultier y los grandes almacenes italianos OVS).

- El año de la moda política. Del Brexit y los diseñadores británicos en pie de guerra (entre otros, firmas como Erdem y Preen o diseñadores como Vivienne Westwood, Victoria Beckham o Jonathan Anderson) y sufriendo ya las consecuencias del referéndum, a las elecciones presidenciales en Estados Unidos y el dilema de la industria de la moda norteamericana acerca de vestir o no vestir a Melania Trump, en el centro de la polémica.

- El año del enfrentamientos entre editoras de moda y blogueras. A propósito del choque entre varias editoras de moda e influencers como Leandra Medine, Susie Lau o Danielle Bernstein.

- El año de la celebrity diseñadora. Y no lo decimos nosotros sino Google. Y es que la misteriosa "Becky with the good hair" del superéxito "Sorry" de Beyoncé (o lo que es lo mismo: Rachel Roy); la propia Beyoncé (Ivy Park es la línea de ropa deportiva que ha creado este año junto a TopShop); Zendaya (la cantante metida a actriz lanzaba el pasado mes de noviembre su primera línea de ropa: Daya by Zendaya); Kendall y Kylie Jenner, que triunfan entre las milénicas con su marca homónima o Kanye West, el genio detrás del fenómeno Yeezy, han sido los "diseñadores" más buscados por los internautas en 2016. Por otra parte Rihanna se subía y consolidaba prácticamente al mismo tiempo como diseñadora en París, Zayn Malik era elegido como próximo colaborador de Versus Versace y Selena Gomez fichaba por Coach.

- El año en que la (nueva) gente "normal" se convirtió en icono. La modelo transgénero Hari Nef, Petra Collins -la fotógrafa canadiense que encandila a Alessandro Michele- y Ashley Graham así lo han demostrado. Igual que firmas como Undercover o Hood by Air, al igual que Vetements, con la artistas neoyorquina Eliza Douglas y la estilista de la firma Lotta Volkova como musas definitivas de Demna Gvasalia, así como Audra Avizienis, una modelo quincuagenaria a la que en su momento se relacionó con John John Kennedy, como inspiración de las Olsen en The Row. Si bien la industria de la moda tiene varios frentes abiertos a propósito de la diversidad racial, otro tipo de pluralidad, sin género y fuera de los típicos cánones (y edades) de belleza, es posible.

- El año en que los "hijos de" pasaron a ser los modelos de moda. Así lo han demostrado Kaia (nueva musa de Miu Miu) y Presley Gerber, hijos de Cindy Crawford; Iris (nueva musa de Chanel) y Rafferty Law, hijos de Jude Law; Lily-Rose Depp (imagen del nuevo agua Nº5); Gabriel-Kane Day-Lewis y Dylan Brosnan; Willow y Jaden Smith (este último posando para una campaña femenina de Louis Vuitton), así como Dylan Jagger Lee (hijo de Pamela Anderson). Y es que la generación millennial ha sido clave este año tanto dentro como fuera de la pasarela

- El año de la copia verdadera. O de cuando Demna Gvasalia y Alessandro Michele se empeñaron en jugar a imitar la imitación vía sus últimas colecciones de ropa. Por otro lado, Virgil Abloh presentaba la primera colección de bolsos de Off-White simulando un top manta a las puertas de su desfile parisino.

- Un año de pérdidas irreparables. 2016 fue el año en el que perdimos a iconos de estilo irreemplazables como David Bowie, Prince o George Michael además de China Machado, Zsa Zsa Gabor o la princesa Leia; así como diseñadores de la talla de Sonia Rykiel y André Courrèges además del malogrado Richard Nicoll.