Lo que comenzó siendo una divertida (e ingenua) idea entre amigas ha terminado por convertirse, en menos de tres años, en una de las plataformas de alquiler de ropa más aclamadas a nivel nacional. Cuando Blanca Mayoral (Málaga, 1995) pensó en crear un "Glovo de ropa" tras la pandemia de la Covid-19, como ella misma afirma, nunca consideró la posibilidad real de que eso terminaría por transformarse en Lend the Label, un servicio que ofrece al usuario la posibilidad de alquilar looks, así como de rentabilizar las prendas de su armario, siguiendo así una corriente hacía una moda totalmente circular.

"A raíz de ese concepto empezamos a estudiar modelos de negocio internacionales que alquilaban prendas durante un tiempo limitado y nos pusimos manos a la obra", cuenta Blanca a Harper's Bazaar en relación a este proyecto lanzado junto a su mayor aliada, Ángela González. "Empezamos a mandar encuestas a muchísimas mujeres con el objetivo de entender sus necesidades y perfilar el tipo de modelo de negocio y tras 5 meses trabajando sobre papel, lanzamos el negocio", señala emocionada.

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Cortesía Lend The Label
Lend The Label.

Emprender, una fusión de contrastes

A diferencia de lo que supone este proceso para una mayoría muy amplia, Blanca explica que en su caso "el emprendimiento no fue una decisión, sino una oportunidad". Ella no venía de una familia de empresarios o emprendedores, ni siquiera pertenecía a esta industria, era biotecnóloga y acababa de terminar unas prácticas en una multinacional. "No fue la moda o el sector lo que me impulsó a emprender si no las ganas de poder ofrecer un servicio que en el momento no existía y que yo sabía que miles de mujeres como yo, iban a recibir con los brazos abiertos".

"No fue la moda lo que me impulsó a emprender si no las ganas de ofrecer un servicio que no existía"

Un camino repleto de sorpresas, que ella misma define como "una montaña rusa", donde ha sido "el compromiso y el instinto" lo que le ha mantenido a flote. Y no precisamente una ayuda por parte de terceros. "Cuando emprendimos pensábamos: somos mujeres de 25 años, bien preparadas.... alguien nos echará una mano, y hasta ahora no hemos recibido ninguna ayuda, lo cual no es del todo negativo pues demuestra que el negocio se sostiene y crece por sí mismo, pero si echo en falta ciertas medidas que faciliten el camino a nuevos emprendedores", nos cuenta.

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Cortesía Lend The Label

Actualmente, Blanca cuenta con una gran tripulación, así es como ella misma bautiza al grupo de mujeres que forman Lend The Label, "donde cada persona impregna el proyecto con su esencia personal y se deja la piel por mejorar el servicio cada día, de ahí que todas nos sintamos tan importantes en cada logro y tan comprometidas con el proyecto". Una familia, concepto que la propia CEO utiliza.

El 'fashion renting' como modelo de negocio

La moda era un sector desconocido para Blanca Mayoral y por lo tanto también el fashion renting. Aunque pronto entendió el motivo de su éxito. "Cuando lo descubrí no me sorprendió en absoluto. Si nos fijamos en cualquier industria, todas ellas están transformándose desde productos hacia servicios. Ya no consumimos películas, tenemos plataformas como Netflix, no consumimos CDs, utilizamos Spotify; los libros se han sustituido por Kindle, compartimos coche a través de Blablacar e incluso nuestras casas con plataformas como Airbnb", explica Blanca. ¿Y la moda? "Cuando se me ocurrió que podíamos compartir nuestros armarios sin necesidad de desprendernos de las prendas para siempre solo deseé ¡haber empezado antes!", nos señala.

El impacto de las redes sociales nos ha llevado a creer (erróneamente) que tras mostrar una prenda en redes sociales, esta ya no vale, o lo que es lo mismo, debe guardarse en el armario. "A día de hoy, y sobre todo las mujeres jóvenes, invertimos en prendas de coste elevado, como puede ser un vestido para un evento, o una boda, lo estrenamos, posteamos nuestro look e inmediatamente perdemos la ilusión por volver a llevarlo, total, "todos lo han visto. No tiene ningún sentido, es una prenda preciosa que se queda colgada en el armario por si con suerte vuelves a llevarla", manifiesta Blanca, a la vez que señala que fue en el momento que se dio cuenta de todo aquello cuando creyó que debía buscar una solución.

"Una comunidad donde las mujeres pueden alquilar prendas especiales a un coste reducido"

Lend the Label es precisamente una luz verde a esta situación es lo que nosotras o la propia Blanca podría definir como "un armario compartido". Un proyecto que ha terminado por convertirse en una "comunidad donde las mujeres pueden alquilar prendas especiales a un coste reducido o poner en alquiler sus propias prendas durante el tiempo que quieran monetizando así sus armarios y contribuyendo con la moda sostenible". Además, bajo un mecanismo sencillo y simple, apto para quienes cuentan habilidad con este tipo de webs, pero también para quienes están empezando a navegar en ellas. Tan solo tienes que seleccionar el look que deseas, elegir la fecha del evento y decidir si quieres que te llegue a casa o recogerlo tu misma. Y en el caso de estar al otro lado, ser quien pone su armario a la venta, las bautizadas como lenders, "deben rellenar un formulario y si la prenda es aceptada comienzan a recibir ingresos cada vez que esta se alquila". Ganan ambas partes.

lend the label
Cortesía Lend The Label

La moda, en el (buen) camino hacía la sostenibilidad

El cambio en la industria de la moda en los últimos años es evidente -hasta ahora la segunda más contaminante, solo por detrás del petróleo-. No solo las firmas de ropa han modificado sus procesos de producción y han apostado por iniciativas más sostenibles tanto en la confección como en la distribución -como es el caso de Adolfo Dominguez, H&M, Mango, incluso Zara, con su nuevo servicio pre-owned- también la población ha comenzado a ser consciente del impacto que el fast fashion supone para el planeta y de la necesidad de darle una segunda vida a nuestras prendas.

"Hace 20 años los jóvenes no sabían qué vestido llevaba una celebrity para salir a tomar café mientras que ahora estamos constantemente expuestos a lo que otros tienen. Las redes sociales han acercado a nuestras vidas los artículos de lujo como nunca antes, cualquier chica de 16 años conoce Prada, Gucci o Louis Vuitton, sin embargo, estos artículos siguen lejos de nuestro presupuesto. De aquí nace el auge de las plataformas de artículos de segunda mano y otros modelos enfocados en la economía circular. Y uno de nuestros objetivos con Lend the Label era este, democratizar la moda de lujo a la vez que creamos un servicio sostenible y a la última", nos señala Blanca.

lend the label
Cortesía Lend The Label

Pero para lograr un futuro 100% sostenible todas las partes deben involucrase. "El cambio hacia una industria de la moda más sostenible implica la colaboración de consumidores, marcas, gobiernos y otros actores", apunta Blanca, que nos habla de comenzar por pequeños gestos, que van desde mirar las etiquetas o apoyar marcas que adopten prácticas transparentes en su cadena de suministro, proporcionando información sobre dónde y cómo se producen sus prendas, a promover marcas y diseñadores que adopten prácticas sostenibles.

"¿Cómo la industria más moderna y pionera es la segunda más contaminante? Me parece insostenible"

"No somos conscientes de los cambios tan grandes que se avecinan y aunque no puedo asegurar que la moda será del todo circular, de lo que estoy segura es que va a dejar de ser una industria como la conocemos. La sobreproducción, los desechos textiles, el fast fashion...", explica Blanca. "¿Cómo la industria más moderna y pionera es la segunda más contaminante? Me parece insostenible", finaliza la CEO de Lend the Label.

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Cortesía Lend The Label