Gucci y el cambio. Si hace un par de semanas la etiqueta florentina anunciaba que a partir de 2017 tan sólo ofrecerá desfiles mixtos, aunando en el mismo show la ropa de hombre y la de mujer, hoy proclama el lanzamiento de su nueva piel, la Gucci Signature. Empleando el célebre motivo de G entrelazada, uno de los códigos más distintivos de la casa, el original curtido “se ha concebido para la producción de bolsos de piel de lujo”; también estará presente en otros productos, incluyendo calzado, maletas y pequeños artículos. El uso de la Gucci Signature, recalca el sello, “marcará la gama más alta de la oferta de la firma”.
Tanto en colores básicos como en tonalidades intensas –rojo hibisco, verde esmeralda, morado brillante, rosa salmón y rosa chicle–, la nueva piel de Gucci promete un éxito parejo al de las últimas propuestas de la etiqueta del grupo Kering.
El presidente de la enseña italiana, Marco Bizzarri, y su apuesta personal al frente de la dirección creativa, Alessandro Michele, saben de lo que hablan.
