Cada vez son más los ingredientes cosméticos que salen a la luz y que deberían formar parte de los cosméticos que componen nuestra rutina de cuidado facial. Uno de los últimos en hacer saltar todas las alarmas ha sido el ácido poliláctico. Este no es un ingrediente nuevo y seguro que a muchas les sonará su nombre, pero ahora se le han descubierto más usos de los que ya tenía en un primero momento. Pero antes de entrar en materia, es importante conocer a fondo este ingrediente para estar al tanto de sus propiedades y de los beneficios que puede tener para la piel. Es decir, las razones por las que se ha puesto tan de moda.

¿Qué es el ácido poliláctico?

El ácido poliláctico es un ingrediente que estimula la producción de colágeno, por lo que hace que la piel se vea más suave al combatir las arrugas. De hecho, el ácido poliláctico tiene un efecto rellenador, vuelve la piel más gruesa y crea, una vez se aplica, unas fibras conectivas dentro de la piel que lo que hacen es que esta se sienta mucho más tersa.

"El ácido poliláctico es un tipo de relleno que no se aplica directamente sobre las arrugas, sino en puntos estratégicos del rostro para que el propio organismo, al empezar a generar colágeno, cree el efecto 'lifting' sin cirugía. La aplicación es con microinfiltraciones por vía subcutánea para llegar a las capas más profundas de la piel y ayuda a mantener la piel más hidratada, suave y elástica, ya que el colágeno refuerza la capacidad de los tejidos para retener el agua", explican desde el Instituto de Benito.

¿Cuáles son los usos del ácido poliláctico?

El principal de los usos del ácido poliláctico es para la cosmética, concretamente en lo que a la piel del rostro se refiere. Cada vez hay más bioestimuladores con este ingrediente que ya es uno de ellos de por sí, como es el Sculptra, que sus beneficios pasan por aumentar el tipo de colágeno 1 hasta un 66,5% en solo 3 meses, alisar y reducir arrugas, restaurar el volumen y mejorar la luminosidad y calidad de la piel. Sin embargo, existen otros tratamientos que se realizan de forma ambulatoria y con anestesia local, como el 'Silhouette Soft', que consiste en introducir las suturas con la ayuda de una micro aguja y sin incisiones. "Las suturas son hilos tensores creados con ácido poliláctico, material completamente reabsorbible y que contiene micro conos. Aunque existen muchos hilos en el mercado ninguno consigue los resultados de tracción como las suturas de 'Silhouette Soft'", añaden desde el Instituto de Benito. En concreto, este procedimiento se emplea para realizar una elevación de cejas, proyectar y dar más volumen a los pómulos, reducir o eliminar el ronquido nocturno, definir la línea mandibular y retraer la piel del cuello.

¿Qué beneficios tiene el ácido poliláctico para el cuerpo?

Pero ahora también se han descubierto sus beneficios a nivel corporal, en concreto para mejorar el aspecto de los glúteos y de los brazos. "Supone una mayor concentración de producto para que pueda ser mucho más eficiente", describe la cirujana y médico estético María Vicente, porque la piel del cuerpo y de la cara es completamente distinta.

"El producto en concreto se llama Lanluma X y lleva una concentración de 630 mg. Los Laboratorios Sinclair Pharma lo han formulado específicamente para remodelar y contornear grandes áreas del cuerpo. Puede usarse para tratar la parte superior de los brazos, las caderas, los muslos, las rodillas, las pantorrillas, las manos, el escote y los glúteos. Según el caso se utilizan unas u otras diluciones", detalla la doctora Virtudes Ruíz. Realiza también una función de bioestimulación dérmica. "A diferencia del ácido hialurónico convencional, que se utiliza desde hace años para ‘rellenar’ depresiones, este ácido poliláctico se comporta como un relleno dérmico bioestimulante que produce colágeno nuevo y mejora sustancialmente la firmeza, además de aumentar el volumen donde es necesario, proyectando y redondeando las formas de una manera muy natural”, concluye la doctora Vicente.