Para muchas mujeres, tener las cejas teñidas o pintadas se ha convertido en una necesidad desde que se llevan las cejas pobladas, con volumen y las que dibujan un arco perfecto pero grueso; una tarea que lleva tiempo terminar con éxito, especialmente a primera hora de la mañana cuando prepararse para el día a día es una carrera contrarreloj. Por eso no es de extrañar que la técnica del microblading esté en auge.

Como en cualquier tratamiento que se realiza en las cejas para lucirlas perfectas hay que tener mucho cuidado con el cómo y dónde nos lo hacemos: "Los tres errores más comunes en el momento de hacer la técnica de microblading se producen para lograr la asimetría de la ceja, acertar con el color y, por último y el más importante, cuadrar el diseño", cuenta Larisa Nastase, experta en cejas.

¿Qué es el 'microblading'?

Pero antes de entrar en materia, lo primero es aclarar en qué consiste el microblading. Se trata de una técnica de maquillaje permanente que se utiliza para reconstruir o rellenar la ceja, así como hacerla más espesa. Es decir, es una especie de tatuaje que imita los pelos de las cejas, que se dibujan de forma muy natural y realista mediante una pluma que deposita el pigmento de color en la dermis. En lo que respecta a la duración, lo habitual es que dure de seis meses a dos años.

"El microblading permite, por medio de la técnica pelo a pelo, trabajar el diseño de las cejas, corrigiendo asimetrías y densificando las zonas carentes de vello. Se trata de una técnica en la que, de forma manual y a través de un inductor llamado Tebori, dibujamos pelitos imitando el crecimiento natural del vello. El resultado es una ceja simétrica muy natural y favorecedora", explica Estefanía Ariza, quien añade que con este procedimiento se obtienen resultados duraderos al tratarse de una técnica semipermantente, aunque requiere de sesiones de mantenimiento para reforzar tanto el color como la forma.

¿Cuáles son los errores más comunes que cometemos al realizar la técnica del 'microblading'?

A pesar de ser una técnica que está en auge y que se practica a diario, es muy sencillo que el resultado no sea el esperado. Y es que, se necesita ser todo un experto para imitar el vello de la ceja de manera regular y simétrica. De hecho, es aquí en lo que más hay que tener en cuenta, donde radican los errores más grandes que arruinan por completo un microblading, tal y como señala Nastase.

La asimetría de la ceja

Las cejas tienen que guardar cierta distancia entre una y otra y, por supuesto, deben quedar en el mismo sitio sobre el ojo. "Nos encontramos con cejas demasiado juntas, es un error sobre todo de principiantes. Hay que tener en cuenta los puntos de inflamación cuando está pigmentado", cuenta la experta. "Otro de los errores más comunes son las cejas demasiado bajas. Este efecto entristece mucho la mirada. Este error se comete al no tener presente durante el proceso los puntos de inflamación", añade Nastase.

El diseño del pelo en formato estanco

Aunque el microblading imite la forma de la ceja pelo a pelo, es un error pintarla así pues se consigue el resultado contrario. Cuando se pinta de esta forma, se origina una ceja que parece una espina de pescado o un peine. Algo que ocurre también por "realizar el proceso de micropigmentación con herramientas no apropiadas. Debemos utilizar una aguja óptima, en este caso debe tener un diámetro mínimo de 0,18 o 0,15", sentencia Nastase.

Qué color se debe escoger en función de la ceja

Acertar con el tono de cejas en el maquillaje es fundamental, pero puede pasar que el color escogido de la tinta no sea el apropiado para ti. Larisa Nastase recomienda hacer previamente un tratamiento en las cejas con Henna, lo que permitirá que la clienta se vea con el color y aprecie por sí misma si es el que realmente le funciona.

El tono natural de tu piel

Las tonalidades de la piel puede variar de claro a oscuro, por lo que es fundamental escoger un pigmento que se adapte al tono natural de cada uno. Pero, además del tono, también debe considerarse el subtono –ya sean cálidos o fríos– porque ayudará a lograr unas cejas definidas con un aspecto natural.

El color natural del cabello

La finalidad siempre debe ser igualar el pigmento al color del cabello natural de quien se realiza la técnica. Por ejemplo, para quienes tienen el cabello castaño claro, se elegirá un tono similar, mientras que para aquellas personas con cabello rubio, se escogerá un tono claro.

La preferencia personal de cada cliente

"La preferencia personal es otro factor crucial para elegir el pigmento adecuado. Algunos clientes pueden preferir una ceja más dramática y atrevida, mientras que otros pueden preferir un resultado de aspecto más natural", explican desde The Beauty Ink Store.

La calidad del pigmento

También es fundamental prestar atención a la calidad del pigmento. Los pigmentos de mayor calidad se formulan con el fin de que duren más tiempo y proporcionen una mejor retención del color. Por esta razón se deben buscar pigmentos específicamente formulados para la técnica del microblading y que estén libres de sustancias químicas perjudiciales.