Mientras que la moda vive una era donde la transparencia y la provocación son de las tendencias que más triunfan, Carolina Herrera se muestra firme con su estilo (formal), como un oasis en mitad del desierto. Su elegancia innata –transmitida en cada una de sus prendas– no varía desde que fundara la firma hace 30 años, y sus ideales tampoco. La diseñadora ha reflexionada acerca de la moda actual, de los iconos de moda y de los nuevos diseñadores para el Washington Post.

Porque Carolina se ha mostrado impasible siempre y no ha querido mostrar una cara –moderna– que no tiene que ver con ella. "Si eres un diseñador que nace fresco y moderno, está bien, entonces puedes hacerlo. Pero lo que no entiendo es un diseñador que se quiera ver fresco y moderno y quieren ser como los recién llegados. Confundes al cliente", recoge la entrada del blog escrita por el periodista del Washington Post. Porque ella no quiere eclipsar lsus colecciones, es una modelo más –sin quererlo– del estilo de la firma con su impoluto uniforme donde la camisa blanca con cuello pocas veces falla. Carolina Herrera mantiene sus raíces pero se refresca con las nuevas tendencias tratando de ofrecer algo nuevo cada temporada sin caer en tendencias que no van con ella. Y triunfa, porque es habitual ver sus diseños sobre la alfombra roja.

De esas tendencias que ella no comparte, hace hincapié en aquellos diseños que lucen celebrities en la alfombra roja y donde la transparencia impera sobre el cuerpo de la famosa. Algunos diseñadores piensan: "es muy moderno estar desnudo o casi desnudo. Piensan que van a atraer a la gente joven si hacen esos vestidos. ¡No!". Añade: "¡Están casi desnudos! ¡Por Dios! Están intentando llamar la atención de la gente. En la vida normal, debe haber un poco de misterio". La diseñadora venezolana habla de celebrities como Beyoncé y su vestido de Givenchy en la alfombra roja de la gala del Metropolitan Museum, Kim Kardashian o la manía de Jennifer López y dejar poco a la imaginación. "Se supone que son iconos de moda y no llevan absolutamente nada". ¿Se darán por aludidos?