Charlene de Mónaco reaparece en el Baile de la Rosa después de 10 años y lo hace por todo lo alto con un mono estilo Cher

El Baile de la Rosa es un evento muy señalado para el Principado de Mónaco por sus importantes fines benéficos, su homenaje a la princesa Grace Kelly y, por supuesto, por la asistencia de personas muy influyentes de la alta sociedad. Así, no es de extrañar que, cada mes de marzo, las cabeceras más importantes a nivel nacional e internacional se inunden de titulares relacionados con la gala benéfica y, por supuesto, la asistencia de algunos de los invitados más señalados.

Es el caso, por ejemplo, de las siempre elegantísimas Carolina de Mónaco y Carlota Casiraghi, que en esta ocasión vuelven a convertirse en dos de las invitadas más sofisticadas y glamurosas del acto. Sin embargo, si hay alguien que, de verdad, ha cumplido el dresscode-que este año se enfocaba en la música disco de los años 70 y 80- esa ha sido la mismísima Charlene de Mónaco.

Y es que, la princesa consorte fue la que verdaderamente siguió la etiqueta al pie de la letra luciendo un mono largo cubierto en su totalidad por lentejuelas que podría haber lucido Cher, el máximo exponente de este estilo tan transgresor propio de la década.

Charlene de Mónaco sorprende en el Baile de la Rosa 2024 con un mono de estilo disco

La princesa Charlene siempre ha sido mundialmente conocida por su impecable sentido del estilo y su capacidad para llevar el estilismo más apropiado para cada ocasión. Sin embargo, en esta ocasión, Charlene se destacó aún más al reflejar a la perfección el espíritu de la moda disco inspirándose en una de las mayores iconos del escenario: Cher. Artista e icono de la moda cuyos llamativos estilismos de estilo disco y cubiertos de lentejuelas y colores llamativos traspasaron fronteras.

Para ello, la esposa del príncipe Alberto II se decantó por lucir un mono largo de lentejuelas que nos trasladaba automáticamente a aquellos inspiradores años. Concretamente con un diseño firmado por Elie Saab protagonizado por la combinación de lentejuelas doradas y plateadas, así como por su patrón de manga larga, escote pronunciado en pico y pernera ligeramente acampanada que se ceñía a la perfección a la silueta de Charlene, en parte, por el detalle de la costura en la cintura que conseguía un efecto de cuerpo de 'reloj de arena' muy favorecedor.

Para completar su look, la princesa optó por joyas minimalistas, pero muy acertadas. Concretamente por un par de pendientes largos de diamantes. Además de un bolso tipo clutch de la misma firma del vestido.

El resultado es un conjunto perfecto para la ocasión y para alzar a Charlene como una de las invitadas mejor vestidas del evento.