Lo más probable es que entre semana te cueste un poco (o mucho) despertarte con la alarma del móvil. Sin embargo, aunque sea un suplicio, consigues salir de la cama en tu día a día. Aunque te cuesta, no te importa porque sabes que durante el fin de semana o los días libres/festivos, dormirás sin la necesidad de hacer nada al día siguiente. Además, no todo el mundo es madrugador, hay personas que son trasnochadoras y otras más madrugadoras. Por mucho que algunos artículos enfaticen en la idea de que “sólo los madrugadores triunfarán”, no siempre es así. Grandes escritores, artistas y políticos son más de trabajar y reflexionar por la noche que por el día.
Pero, ¿sabías que esto no es tan bueno como parece? ¿Hasta qué punto puede dañar tu salud? Las consecuencias de esto, aparentemente sencillo, te pueden provocar algo conocido como jet lag social.
Antes de explicarte en qué consiste el jet lag social es importante refrescar que todos y cada uno de nosotros tenemos un ritmo circadiano que controla y regula nuestro sistema interno y está relacionado con la luz, la oscuridad y la rotación de la tierra. Por eso dura, más o menos, 24 horas. Así, por ejemplo en experimentos, personas a las que se aislaba totalmente y no sabían si era de día o de noche, el ritmo circadiano se ajustaba de forma natural a 24 horas y 11 minutos. Aunque cada persona duerme unas u otras horas, la variación entre ellas se llama cronotipo, lo que hace que existan personas madrugadoras/matutinas, intermedio y trasnochadoras/vespertinas.
Entonces, ¿en qué consiste el jet lag social? Como bien sabes, el jet lag ocurre cuando viajas a distintos husos horarios y tu cuerpo debe reajustarse y re-habituarse (a la vuelta) a los distintos horarios de luz y de sueño. Claro está, explicado de forma sencilla. El jet lag social ocurre cuando, las personas que tienen el cronotipo de trasnochador/vespertino se obligan entre semana a tener horarios de madrugador/matutino y, durante los fines de semana o durante los días libres, quiere recuperar todo el sueño acumulado. Este desajuste del sueño y, por lo tanto, de la rutina diaria, de los horarios de comidas, etc, puede provocar obesidad, fatiga, somnoliencia, mal humor, enfermedades del corazón, diabetes, hipertensión, entre otras cosas.
El profesor Till Roenneber del centro Munich Center of NeuroSciences está estudiando esta diferencia entre el reloj fisiológico y el reloj social. ¿Y cómo se sabe o se puede medir el jet lag social? Para ello hay que calcular el punto medio de sueño de una persona durante los días laborales y los días libres. Por ejemplo, si una persona duerme durante la semana desde las 23 hasta las 7 de la mañana, el punto medio de sueño son las 3 de la madrugada. El fin de semana, si la persona duerme de 1 a 11 el punto medio serían las 6 de la mañana. Por tanto su jet lag social sería de 3 horas.
¿Cómo saber si lo tienes? Si te cuesta levantarte por las mañanas, si sabes que eres una persona trasnochadora (que no es algo negativo, es algo fisiológico) y has asentido más de una vez a algo de este artículo.
Y, ¿cómo se puede solucionar? En un mundo avanzado lo ideal sería ajustar tu trabajo a tu ritmo circadiano, a tu cronotipo, pasar más tiempo tomando luz solar y al aire libre pero, como eso todavía no es posible, lo mejor es tomar melatonina. La hormona de la oscuridad influye en la fertilidad, el ánimo, el sistema inmune, la menstruación, el aprendizaje, la memoria, el envejecimiento, el sistema cardiovascular, además de regular el sueño.
