“A mí no me preguntes, sólo soy una chica”. No sería hasta la aparición en escena de su versión parlante que esta Stacy Malibú llamara la atención más allá de lo que una muñeca cualquiera lo puede hacer. El descarrilamiento sería en Lisa contra Stacy Malibú, capítulo dentro la quinta temporada de la inmortal Los Simpson, emitida en 1994. Stacy Malibú había aparecido en anteriores ocasiones, pero a nadie le interesó. Hasta que abrió la boca.
“Ojalá nos enseñaran a ir de compras en el colegio”, retumba en la sala. Pero aquellas ideas machistas que esta Stacy escupía no eran otra cosa que un revuelo planeado a conciencia. Aquella muñeca vacilona, machista y actitud marcadamente sexista no era otra cosa que una parodia de la tan ridícula Barbie.
Todo la tiene. Fue Jayne Mansfield la parodia extrema de Marilyn Monroe. Lo fue Marujita Díaz de Sara Montiel. Lo fue Paco León de Raquel Revuelta. Y lo es Stacy Malibú de Barbie. Los Simpson son la parodia de la vida.
Lo hicieron burlándose del cliente ‘quiero y no puedo’ de Abercrombie and Fitch, llamándolo Abercrombie and Rich. También con aquella Shary Bobbins, que no era otra cosa que la Mary Poppins de Disney con problemas de alcoholismo. Y ya sabemos lo que le gustaban a aquella los sospechosos terrones de azúcar para el desarrollo infantil.
Cuando Lisa Simpson tira de la cuerda de esta bandida de la vida y escucha tan machistas mensajes como “Comprémonos maquillaje para gustar a los chicos”, corre a la fábrica más cercana para alzar el puño de protesta. Lo que no sabemos si Lisa ha visto todavía son los siguientes vídeos virales a través del wifi español. “Pues la que dice algo raro es mi Stacy”. Y tanto…
