No felicites, reivindica. No festejes, lucha. Deja de usar la palabra empoderamiento y empodérate tú. Muchas reivindican que todos los días son 8 de marzo, que cada día es el Día Internacional de la Mujer. Y quizá sea cierto, pero también lo es que la vida, como las luchas, se alimentan de la fuerza de los símbolos. Basta echar mano a la historia y recordar lo que otras mujeres ya lograron. Recordarlas y sumarse a ellas.
En 1857 y en 1908 ocurrieron dos manifestaciones que marcaron la lucha por la igualdad de derechos de las mujeres. El 8 de marzo de 1857, las trabajadoras de una fábrica textil del Lower East Side se rebelaron contra las condiciones de trabajo. La mayoría de empleadas eran mujers y trabajaban más de 12 horas al día por pírricos salarios. Cobraban hasta un 70% menos que los hombres.
En 1908, 40.000 costureras de fábricas de Estados Unidos fueron a la huelga para reclamar igualdad de derechos. En una de esas fábricas, en la Cotton Textil Factory, en Washington Square, Nueva York, los dueños cerraron las puertas y ventanas con las mujeres dentro. Hubo un incendio en el edificio y las puertas siguieron cerradas. Más de 120 mujeres murieron.
Tres años después, el 25 de marzo de 1911,más de 140 trabajadoras fallecieron en otro incendio, esta vez en la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist de Nueva York. Ese terrible suceso motivó numerosas movilizaciones que llegaron a cambiar la legislación estadounidense.
Conviene recordar y seguir con ese empoderamiento, por todo lo que queda aún pendiente en esa lucha por la igualdad de género. Este 8 de marzo de 2016, en las redes sociales ya se está compartiendo una lista de cosas para hacer en este día, para marcar la diferencia.
Desde la cuenta de @EverydaySexism han publicado el listado con 10 sugerencias, que van desde hacer una donación a una asociación de ayuda a la mujer hasta alzar la voz contra el acoso sexual:
1-Haz una donación a la asociación de ayuda a mujeres víctimas de una violación que tengas más cercana.
2-Comparte un ejemplo de la desigualdad de género que hayas experimentado o presenciado.
3-Habla con algún joven sobre estereotipos de género y consentimiento sexual.
4-Haz el esfuerzo de buscar y documentarte sobre el trabajo de mujeres escritoras, artistas y músicos.
5-Pregunta en tu empresa si tienen política de acoso sexual. Y si no la tienen, pregunta por qué no.
6-Apoya el Convenio de Estambul para prevenir y combatir la violencia contra las mujeres.
7-Haz una lista con el trabajo doméstico y no remunerado en tu propio hogar. ¿Está dividido por género?
8-Pregunta a otras mujeres que conozcas sobre sus experiencias. Puede que te sorprendan sus respuestas.
9-Retuitea algunas de las historias que se están compartiendo con el hashtag #EveryDaySexism para ayudar a concienciar a los demás.
10-La próxima vez que seas testigo de acoso sexual o discriminación, hazte la promesa de decir algo (si es seguro hacerlo), en lugar de mirar hacia otro lado.
