Tener un pelo sano y fuerte es sinónimo, no solo de estética, sino también de salud. Todos los días tratamos nuestro cabello con técnicas que debilitan su fuerza: desde lavarse el pelo con demasiada frecuencia al uso de planchas de pelo, secadores de pelo y la realización de peinados específicos como trenzas o moños pulidos. Sin embargo, también hay otros factores –que no podemos controlar– como la exposición excesiva al sol, que debilita y deteriora la calidad del cabello considerablemente.

Si bien recurrimos a menudo a mascarillas para reparar el cabello seco y encrespado, acondicionadores con aclarado y sérums y aceites de pelo que nos ayudan a paliar los efectos que se producen sobre el mismo, también hace falta que conozcamos al milímetro cada uno de los ingredientes que incluyen nuestros cosméticos. Porque, dependiendo del tratamiento que escojas, puedes estar ayudando o empeorando sus propiedades.

Y si hay un tema de conversación que se repite últimamente entre los expertos en belleza sobre el cuidado capilar y los tratamientos a cada edad, ese es el de los aminoácidos. Puede que para ti los aminoácidos sean desconocidos, pero no te preocupes, porque a partir de ahora los aminoácidos se convertirán en tus aliados indiscutible de belleza. ¿Por qué? Porque entre sus múltiples beneficios destacan que aumentan la humedad del cuero cabelludo, alivian la caspa y aportan fuerza y al cabello, haciendo que éste se vuelva más resistente contra los factores externos que lo perjudican.

¿Qué son los aminoácidos?

Puede que no lo sepas, pero en realidad tu pelo ya tiene aminoácidos y, por tanto, tiene queratina. Como otras proteínas, los aminoácidos son los encargados de sintetizar esta queratina y de ayudar al crecimiento del cuerpo, del cabello y de las uñas. Entonces, te preguntarás la razón por la cual estamos hablando de ellos.

¿Qué tipos de aminoácidos existen?

Existen dos tipos de aminoácidos: los esenciales (de los que tu cuerpo ya dispone) y los no esenciales (aquellos que son externos, ingeridos en vitaminas y suplementos o alimentos). "Hay 9 aminoácidos esenciales: histidina, isoleucina, leucina, lisina, metionina, fenilalanina, tronina, triptófano y valina. Se encuentran principalmente en productos que contienen proteínas animales (como mariscos, carne de res, aves, productos lácteos y huevos), pero también en vegetales como la quinoa y los productos de soja. En lo que respecta a los aminoácidos no esenciales, podemos encontrar 11: alanina, arginina, asparagina, ácido aspártico, cisteína, ácido glutámico, glutamina, glicina, prolina, serina y tirosina. Algunos de estos aminoácidos no esenciales solo se producen cuando estamos enfermos o en periodos de estrés", explican desde Paula's Choice.

Para encontrar el equilibro perfecto y el nivel más adecuado de aminoácidos, lo ideal sería recibir ayuda de ambas partes, es decir, construyendo una dieta completa y equilibrada ademas de una rutina alimentaria que te proporcione apoyo de aminoácidos en tu cuerpo.

Si observas cómo tienes el cabello, puedes conocer también cuál es el estado de tus aminoácidos. Cuando éste está débil o no crece el centímetro estipulado que debería hacerlo por mes, entonces es probable que tus niveles de aminoácidos sea bajo y que entonces necesites recurrir a la dieta o suplementos que te ayuden a incrementar los niveles de aminoácidos. En lo que respecta a las melenas teñidas o con mechas o el pelo rizado, son más propensos a tener la cutícula dañada y mucho más abierta que otros, por lo que se debilita y no retiene la humedad en sus poros. Aquí tienes la primera señal de que necesitas incluir más aminoácidos en tu rutina de belleza.

¿Cómo actúan los aminoácidos sobre el cabello y cuáles son sus resultados?

Los aminoácidos agregan fuerza, como cualquier proteína, a las hebras del cabello y así consiguen reducir su tamaño permitiendo aguantar mejor la humedad ya que se unen a a cutícula y rellenan los huesos. Los resultados: un cabello más sedoso y brillante.