¿Cuántas fotografías de amigos has visto que han sido censuradas? ¿Cuántas veces has leído en tus stories quejas por fotos sugerentes que han sido eliminadas? Sea la respuesta sí o no, muchas, pocas o nada de veces, da igual, el caso es que existe una censura encubierta muy descarada en Instagram. Gracias a la denuncia o al categorizar como spam de la conocida red social, cualquier cosa que se salga un poco de la norma, sea diferente, subida de tono o (casi) porno, puede ser eliminada de forma muy fácil.

Aunque esto pueda dar mucha rabia, no porque tú quieras subirte desnuda en tu cuenta sino porque, el mero hecho de no poder hacerlo ya despierta coraje y malestar en el s.XIX, sí que es cierto que, por suerte, existen cuentas y mentes ingeniosas que, a través del arte y la creatividad, consiguen burlar a la censura virtual. Pululando por la red hemos topado con la cuenta de scientwehst.

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Giulia alias scientwehst es una joven artista de 27 años nacida y criada en Florida que, actualmente, reside en Brooklyn, Nueva York. Comenzó su cuenta de Instagram para luchar contra el complejo que tenía (tiene) por sus curvas y hará unos dos/tres años cambió su forma de pensar y decidió promover el ser una mujer thick y agradecer sus formas más redondas. Aunque ahora esté de moda, recordemos que hace unos tres años no estaban tan bien visto el ser exageradamente curvilínea, tener el pecho o el trasero grande o, simplemente, no entrar en el canon convencional.

De forma estratégica y sutil, coloca imágenes de arquitectura en lugares concretos de la anatomía femenina. Algunas de ellas tienen reminiscencias fálicas y otras no pero, con este trampantojo/ilusión óptica, juega contra la dura censura de Instagram. En una reciente entrevista en Highsnobiety explica que sus imágenes han sido eliminadas varias veces y que también su cuenta ha sido borrada en distintas ocasiones.

¿Por qué nos sorprende o nos horroriza tanto un desnudo femenino en una red social cuando, a lo largo de la Historia del Arte, la mayoría de los cuadros, esculturas y desnudos han sido de mujeres?

¿Por qué nos inquieta que alguien muestre su sexualidad en una red social? Cualquier persona es libre de vivir su sexualidad como quiera y, por lo tanto, plasmarla como le plazca. No vamos a entrar en el discurso ni en la discusión de que alguien proyecte sexualidad, morritos o belfies en sus redes sociales para, después, ser una persona lineal o llana en su intimidad, no es nuestro problema. Tampoco el caso contrario, claro está.

¿Por qué si la sexualidad de cada ser humano es algo innato, primitivo e inherente a nuestra naturaleza animal, sigue siendo algo mal visto y juzgado? ¿Por qué si una chica disfruta de su cuerpo y su libertad sigue siendo tachada de forma negativa? ¿Y por qué estas chicas no reciben el mismo respeto que las que se hacen las duras? ¿No estamos en el 2017? Para ser más valorada, ¿hay que mostrar menos o más? ¿Debemos cambiar nosotras o re-educar a los hombres que cosifican y no ven más allá? ¿Por qué todo esto asusta? Porque es muy fácil dar like pero, si te encuentras a una mujer así, no es tan fácil ni respetarla ni tenerla, ni como amiga ni como pareja. Está claro que por no subir o ser tan obvio en las redes sociales no dejas de apoyar la causa o eres una persona sexual, cada persona es libre de elegir su mood virtual y comportarse acorde a él. No por enseñar eres más ni por dejar de enseñar eres menos, aunque a la gente le cueste creerlo.

Sí, todo esto pueden parecer obviedades pero, en realidad, no lo son. Y la censura constante de Instagram es una muestra de ello. Es muy interesante encontrar cuentas de redes sociales que jueguen contra esa prohibición y lo conviertan en una divertida expresión artística.