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Con el paso de los años, la piel se deteriora y requiere un cuidado mayor. Esto sucede como consecuencia de que la dermis pierde luminosidad y elasticidad, surgen las primeras arrugas y/o líneas de expresión e incluso pueden apreciarse las primeras manchas que han ido asentándose en la piel con el transcurso del tiempo. Para muchas mujeres –y en especial para las mujeres a partir de los 40– esta realidad se convierte en una preocupación a la que hay que prestarle mucha atención.

Es por ello que los especialistas beauty recomiendan que, para lucir una piel sana y firme, es imprescindible llevar a cabo una rutina facial que puede combinarse con tratamientos específicos para la piel –ya sea haciendo uso de tratamientos faciales como productos o mediante tratamientos en cabina que se realizan en los centros estéticos–. Pero para saber qué es lo que le sucede a la piel a partir de los 40, hablamos con varios expertos para conocer asimismo cuáles son las claves que nos ayudarán a cuidarla correctamente.

¿Cómo se debe cuidar la piel a partir de los 40?

Descansa las horas suficientes y cuida el contorno de ojos

Para que la piel se regenere, resulta vital dormir bien. Cuando existe falta de sueño, esto se puede apreciar en el rostro mediante la aparición de las bolsas, arrugas y ojeras, siendo esta la principal razón por lo que las expertas recomiendan dormir al menos entre 7 y 9 horas diarias. "La piel del contorno de los ojos es más fina y delicada que otras áreas del cuerpo. Es cinco veces más delgada que la piel facial y, a su vez, esta última es cinco veces más delgada que la del resto del cuerpo. Esta zona cuenta con menos fibras de colágeno y elástica, lo que la hace menos elástica y firme. Además, presenta una menor cantidad de glándulas sebáceas y sudoríparas, lo que la convierte en una piel menos protegida y más propensa a la deshidratación. Debido a estas razones, el contorno de ojos necesita cuidados especiales para contrarrestar los efectos del envejecimiento y la fatiga", cuentan los expertos de Iroha Nature.

Incluye en tu rutina productos ricos en vitamina C

Hacer uso de cremas, productos y/o suplementos ricos en vitaminas C –como lo son los sérums faciales– o el ácido hialurónico –los contornos de ojos, por ejemplo– ayudarán a que tu piel esté y se vea más hidratada. La vitamina C, según cuentan desde La Roche Posay, "tiene propiedades antioxidantes que pueden ayudar a proteger las células del daño causado por los radicales libres, y ayuda a estimular la producción de colágeno en la piel, lo que reduce la apariencia de las líneas finas y las arrugas, mejorando la firmeza de la piel y reduciendo la hiperpigmentación".

Protege la piel del sol

Asimismo, es importante hacer uso de cremas solares con SPF de 25, 30 o 50 –en función de tu tipo de piel así como en función de las necesidades que requiera– pues ayudan a combatir el envejecimiento prematuro que surge en las zonas que se encuentran más expuestas a las radiaciones y a los radicales libres. "El sol daña nuestra piel desde que somos muy jóvenes. Protegernos de él es fundamental, así como aplicar una fórmula que también proteja y mejor la capa hidrolipídica, que es la más importante porque es la que actúa como escudo frente a los agentes externos que debilitan y empeoran el estado de nuestra piel", explica la farmacéutica experta en dermocosmética Asun Arias.

Presta atención a la hidratación

Además de la hidratación externa, la interna resulta vital para que la piel se vea revitalizada. Es por ello que la ingesta de agua –los expertos recomiendan consumir al menos 2 litros diarios– ayudará no sólo a que la piel recupere su elasticidad, sino que ésta obtendrá mayor firmeza y luminosidad.

Protege la piel de los factores externos

Por otro lado, la deshidratación que se aprecia como consecuencia del déficit de agua en la epidermis es otro de los signos más comunes del envejecimiento. En la mayoría de los casos esto sucede a causa de factores como el clima, el tabaco, la mala alimentación e incluso la falta de líquidos.

Presta atención a la salud de la piel

Otra característica común de la piel a partir de los 40 es que las glándulas sebáceas –las principales responsables de sintetizar el sebo, lubricar y proteger la superficie de la piel– disminuyen de manera considerable y, por tanto, la desnutrición y sequedad se pueden percibir en la piel.

Incluye en tu rutina la doble limpieza facial

Desde Germaine Goya, las expertas recomiendan incluir en nuestra rutina de belleza una limpieza facial diaria –ya que ayudan a abrir los poros, recuperar la frescura y eliminar la suciedad acumulada– para mantener la naturalidad de la piel. "Para eliminar impurezas y controlar la secreción de sebo preservando la barrera hidrolipídica es esencial realizar la doble limpieza facial. Lo ideal es aplicar primero un aceite facial ya que es lo que mejor disuelve los restos de contaminación y la crema con protección solar. Luego, el segundo paso se puede realizar con, por ejemplo, un gel limpiador para terminar de arrastrar las impurezas y la suciedad con base acuosa como el sudor", añade Arias.

Utiliza tratamientos específicos para tratar las arrugas

Las arrugas son uno de los signos que más delatan la edad que se acentúan a causa del resquebrajamiento de las fibras de la dermis. "A partir de los 40, disminuye mucho el colágeno y por eso el cuidado de la piel del rostro debe ser más específico. Perdemos vitalidad en el rostro y luminosidad, además, tiende a resecarse. Por ello, deberás elegir una crema de día con una textura más rica, para compensar la menor secreción de lípidos a causa de la edad. También deberás utilizar cremas específicas para algunas zonas como el contorno de ojos y aplicar antiarrugas por las noches con vitamina A, ácido hialurónico o retinol", explica la Dra. Mercedes Silvestre, especialista en Medicina Estética de Alta Gama.

Combate las manchas de la piel

De igual manera, los pigmentos de la piel se alteran y aparecen las primeras manchas en el rostro, cuello, escote y hombros como consecuencia (habitualmente) a una previa y excesiva exposición solar. El tratamiento básico esencial para eliminar las manchas de la piel consiste en proteger correctamente la piel del sol o hacer uso de antioxidantes o productos tópicos que contengan activos despigmentantes, como el ácido kójico, la tretinoína o la hidroquinona. Sin embargo, existen tratamientos que se realizan en consulta con el objetivo de potenciar la acción de las cremas para acelerar así su efecto. "Dentro de estos se encuentran el uso de diversos protocolos antimanchas que incluyen, entre otros, el tratamiento 'feeling' o mascarillas con agentes despigmentantes a altas concentraciones y distintos dispositivos láser", cuenta la Dra. Pilar de Frutos.

Incluye protocolos para eliminar la flacidez

Aunque las causas que originan la flacidez son muchas, lo cierto es que la pérdida de colágeno y elastina tiene como consecuencia la pérdida de firmeza en el rostro. Por ello, para combatir la flacidez, "el mejor tratamiento para tratarla es mantener una correcta hidratación de la piel, pero es cierto que por sí misma a veces no es suficiente y hay otros hábitos y consejos que se deberían tener en cuenta, como la correcta hidratación –ya sea mediante cremas hidratantes u otros productos que ayuden a reafirmar la piel–, siguiendo tratamientos en cabina e incluyendo en nuestra alimentación alimentos como las legumbres y las carnes magras", concluyen desde Secretos del Agua.