Rania de Jordania está en el lado opuesto de aquellas royals que se caracterizan por un armario plano e incluso aburrido. Con una facilidad innata para dominar todos los estilos, es capaz de convertirse en la más elegante del evento con una falda de vuelo de Dior o despertar todos los elogios luciendo un vestido bordado a mano con el que celebra la artesanía jordana.

Y para uno de los actos más emotivos de los últimos meses ha optado por un vestido negro de silueta ajustada que recuerda mucho a los favoritos de Lady Di. Rania de Jordania ha sido condecorada por su marido, el rey Abdullah, con la Orden del Gran Cordón Enjoyado de Al Nahda (Orden del Renacimiento) en reconocimiento a su distinguido servicio y su papel destacado en el avance de la sociedad jordana.

rania de jordania con vestido ajustado
Courtesy Royal Hashemite Court

Para esta ocasión tan especial, la monarca hachemita ha lucido un vestido negro largo de cuerpo ajustado y un original escote decorado con detalles trenzados en color rojo que destaca por su manga larga y una falda ajustada a la altura de la cadera que va ganando vuelo a medida que se acerca al bajo. Este favorecedor diseño inevitablemente recuerda a algunos de los vestidos favoritos de Diana de Gales para sus eventos de noche.

La princesa de Gales era bastante fiel a los vestidos de tirantes, de escote asimétrico o palabra de honor, pero a la hora de elegir patrón, optaba por los diseños ajustados hasta la altura de la cadera y que luego iban cogiendo vuelo. Esta silueta, que favorece y sienta muy bien, era una de las más repetidas de su armario. Basta recordar el inolvidable vestido morado que llevó a una cena de gala en Chicago en 1996, o el vestido de Catherine Walker con el que acudió en Londres a un acto benéfico de la Cruz Roja para acabar con las minas antipersona en febrero de 1997.

diana chicago
Tim Graham//Getty Images
Lady Di llegando a su cena de gala en Chicago en 1996.
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Tim Graham//Getty Images
Lady Di, con un vestido azul de Catherine Walker, en 1997.

Ahora, Rania de Jordania ha recuperado esa favorecedora silueta, que no solo sienta bien sino que añade comodidad a los vestidos largos y ajustados, muy elegantes pero no siempre fáciles de llevar. Rania, que completó el look con un bolso de mano de Bottega Veneta, ha vuelto a demostrar que a la hora de elegir patrones favorecedores ella es una de las royals que más acierta.