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Paola junto al jardín (Paola, côté jardin) es el título del documental de la cadena belga RTBF que ha vuelto a tambalear los cimientos de la monarquía belga. En esta ocasión no han sido los supuestos hijos ilegítimos del rey Alberto o la herencia de Fabiola de Bélgica, sino las sinceras declaraciones de la madre del actual rey, Paola de Bélgica, que no ha dudado en confirmar que le fue infiel a su entonces marido y que no se arrepiente de ese capítulo de su vida.
"No me siento culpable. Pasó en un momento en el que las cosas no iban bien", explica Paola de Bélgica, reconociendo que el conde Albert Adrien de Munt, fotógrafo de la revista francesa Paris Match, fue la persona por la que estuvo a punto de divorciarse de Alberto de Bélgica. Con él fue fotografiada en una playa de Cerdeña y esas imágenes cayeron como un jarro de agua fría en la corte belga, siempre alerta por los quebraderos de cabeza que daban Alberto, mujeriego empedernido, y Paola, conocida como la princesa rebelde por su estilo, capaz de saltarse las reglas de protocolo por ir a la última.
La pareja (que reinó durante dos décadas) llegó a plantearse el divorcio hasta en dos ocasiones pero los problemas legales que ello podía ocasionar, como la pérdida de la custodia de sus hijos a Paola, frenó las intenciones de ambos royals. No fue esa la única razón que les mantuvo unidos. En el documental, Paola, heredera de una familia noble de Italia, explica que Alberto le dijo que siempre la había amado y esa confesión le emocionó lo suficiente como para seguir adelante con matrimonio, del que se cumplen 63 años el próximo 2 de julio.
Paola de Bélgica también explica que se casó demasiado joven, y le hubiera gustado poder viajar y descubrir el mundo antes de contraer matrimonio, tal y como han hecho sus nietos (entre ellos, Elizabeth de Bélgica), y reconoce que le hubiera gustado ser más cariñosa con sus hijos. Unos hijos que también participan en el documental y, a pesar de la confesión, han dejado clara la admiración que sienten por su madre.
En el documental también participa el actual rey belga, su primogénito, el príncipe Felipe, que asegura que de niños fueron testigos de momentos difíciles en el matrimonio de sus padres, pero que ese perdón es lo más difícil pero también lo más grandes. Los tres hijos de Alberto y Paola, Felipe, Astrid y Lorenzo, fueron siempre el centro de atención de los reyes Balduino y Fabiola de Bélgica, que no tuvieron hijos. Ambos se volcaron en la educación de Felipe, a quien veían como el mejor heredero de Balduino.
