El platino se impone en verano: pásate al lado rubio
Trucos para mantenerlo perfecto a pesar del calor, el cloro y la playa.
Taylor Swift ha sido una de las últimas en caer rendidas al efecto platino, pero no es la única. Emma Stone, Kristen Stewart o Jennifer Lawrence también han paseado sus platinos por la calle y la alfombra roja recientemente. Otras muchas celebrities lo llevan desde hace años, como Gwen Stefani o Michelle Williams y luego esta el conocido caso de Kim Kardashian que solo aguantó una semana; al menos, tenía que probarlo. Tal y como demuestra un reciente estudio llevado a cabo por Wella Professionals, el rubio es “un vicio confesable”. Las tonalidades rubias están asociadas a connotaciones positivas como la capacidad de iluminar y rejuvenecer las facciones, además de ser percibido como un tono más sensual, tanto para los hombres como para las mujeres. Por todo esto la mayoría de las rubias en nuestro país no nacen, se hacen.
Aún así, decantarse por el platino es ir un paso más allá por dos razones: la primera es que no le queda bien a todo el mundo y la segunda es que requiere un mantenimiento muy concienzudo. “Es un tratamiento muy agresivo, hay que darle mucho matiz y brillo para que luzca divino y, sobre todo, necesitamos que el cabello esté 100% sano para que el resultado sea un platino ‘saludable’”, nos explica Diana Daureo, directora del salón Diana Daureo (c/ General Pardiñas, 95). Además es un tono que le queda muy bien “a todas aquellas con rasgos nórdicos: pieles blancas o muy poco bronceadas, rasgos faciales suaves, ojos claros... Y si se lleva con un poco de raíz aporta un estilo bastante cool pero... ¡no hay que caer en la dejadez!”, matiza Diana.
Pero además, en verano nos enfrentamos a otro tipo de agresiones que pueden echar a perder nuestro rubio ideal, así que apuesta por una rutina de cuidados específicos para cuidarlo y mantener un tono perfecto.
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