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De la misma manera que hacemos hincapié en el cuidado de la piel con la llegada del frío, debemos hacer lo propio con el cabello. El hecho de que olvidemos proteger el cuero cabelludo de los rayos UV cada vez que salimos a la calle puede derivar en daños muy perjudiciales que en muchas ocasiones finalizan con un buen corte de pelo si no ponemos solución.
Sin embargo, durante el invierno nuestra melena tiende a secarse y a perder ese brillo tan especial, y el motivo no es otro que el sol, el frío y el aire, que no solo son capaces de secar las puntas sino también de quemar el cuero cabelludo, en el caso del sol. A eso debemos añadir el aumento de la humedad, culpable además de una mayor caída capilar. Pero, ¿es posible evitarlo? Sí, si tomamos las medidas adecuadas. Por fortuna, los expertos en cuidado solar de la firma de belleza Gisèle Denis nos relevan algunos consejos para cuidar y proteger el cabello en invierno.
Cómo cuidar y proteger el cabello en invierno
Empieza por un buen corte de pelo
El nuevo año es el momento perfecto para sanear el cabello. Y aunque sea probablemente uno de los consejos más habituales, es también uno de los más efectivos. En otoño, aumenta la sequedad en las puntas, en muchas ocasiones derivando en un resultado muy quebradizo. Por ello los expertos recomiendan optar por retoques regulares que ayudarán a mantener el pelo en buenas condiciones y reducir así el riesgo de puntas abiertas.
Protege el cuero cabelludo
No es lo mismo proteger el cabello que el cuero cabelludo. Muchas veces nos olvidamos de prestarle atención y cuando, por ejemplo, se expone de forma prolongada al sol, puede afectar directamente a la calidad del cabello e incluso debilitar las puntas. Utilizar tratamientos específicos como un protector solar en nuestra rutina capilar es la principal solución. "Tener un cuero cabelludo saludable significa tener un cabello sano", afirman los expertos.
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Lava el cabello con menos frecuencia
"El aceite que el cabello produce de forma natural lo protege del sol, por lo que es recomendable espaciar los lavados capilares para dañar lo menos posible el cabello y el cuero cabelludo", resaltan. Si en alguna ocasión sientes que tu pelo está más graso de lo habitual o de igual manera quieres evitarlo, los recogidos como los moños bajos o las coletas bajas son las mejores alternativas.
Protege el cabello si utilizas tintes
Podría parecer obvio, pero nunca está de más resaltar este aspecto. Los tratamientos químicos mezclados con el sol pueden dar lugar a una decoloración del cabello. De ahí que utilizar champús morados u otros productos destinados a pelos teñidos sea prácticamente una obligación.
Evita las planchas u otras herramientas de calor
Lo más recomendable es dejar secar el cabello al aire siempre que sea posible, pero si te resulta indispensable para pisar el asfalto, deberás ajustar la temperatura de las herramientas de calor y recurrir a productos de protección contra el calor así como a secadores de pelo con tecnología iónica. De la misma manera, los expertos de Gisèle Denis hablan del uso de un cepillo de pelo de dientes anchos. ¿El motivo? Ayudará a la hora de desenredar y evitará que el pelo se rompa al hacerlo.
