Harper's BAZAAR participa en varios programas de afiliación de marketing, lo que significa que Harper's BAZAAR recibe comisiones de las compras hechas a través de los links a sitios de los vendedores.
Mascarillas para piel grasa: las 25 mejores del mercado
Las formulaciones de estos cosméticos tratan los problemas más comunes de este tipo de piel: el sebo excesivo, la aparición de acné y los puntos negros, entre otros.
- Las 10 mejores mascarillas para piel seca del mercado
- Los 20 sérums para cuidar las pieles grasas más recomendados
- Piel grasa: los mejores ingredientes para cuidarla
El momento en el que nos ponemos una mascarilla es un remanso de relax. Un ratito en el que conseguimos dedicarnos unos minutos para el autocuidado. Sin embargo, eso no implica que no seamos exigentes con los resultado del producto cosmético y más cuando se trata de uno que requiere unos veinte minutos de aplicación. Las mascarillas son un cosmético de acción intensiva que proporcionan beneficios a la piel a través de activos concretos. Pero, ¿qué tipo debemos usar? Eso depende de de varios factores, como el tipo de piel y las necesidades concretas que esta tenga en cada momento.
La piel grasa se suele caracterizar por un exceso de sebo y la tendencia a la aparición de brotes de acné, por tanto le vendrán bien formulaciones que mantengan a raya estas dos características así como una rutina efectiva para eliminarlo. En cuanto a los ingredientes cosméticos más recomendados, la arcilla blanca regulará el exceso de sebo y el ácido salicílico mantendrá el control sobre la aparición de granitos.
Como con la mayoría de tratamientos para el cuidado de la piel, para ver efectos reales hay que ser constantes y tomar el hábito de aplicar una mascarilla facial una vez a la semana. Puedes planteártelo como un momento de placer contigo misma y disfrutarlo en compañía de un buen libro, como te proponemos aquí.
¿Qué tipo de mascarillas necesitan las pieles grasas?
Otro de los aspectos que suelen buscar las pieles grasas en una mascarilla es el aporte de luminosidad. Y es que, aunque a veces se confunde, esta no es inherente a las pieles grasas solo por el hecho de que segreguen continuamente grasita, pues hablamos de brillos diferentes. Mientras que el brillo característico de la piel grasa es mucho más potente y de carácter aceitoso, el segundo denota una piel cuidada y saludable.
Por último, la piel grasa también lidia con otro caballo de batalla: la apariencia visible de los poros. El aceite de árbol de té, el ácido láctico y el ácido salicílico, que tiene múltiples efectos, pueden ayudar a mejorar este aspecto de las pieles grasas. Por su parte, el retinol elimina las células muertas que se desprenden de la piel y permite que crezcan células nuevas y saludables. Al limpiar los poros de la obstrucción por aceites y restos orgánicos, su apariencia es menos visible. El ácido salicílico en concreto descompone la suciedad y el aceite que forman puntos blancos y espinillas, facilitando el cerramiento de los mismos, haciendo que a la vista humana se aprecien menos. Y si tienes que hacer frente a varias de estas cuestiones y tienes un tratamiento preferido para cada una de ellas, puedes irlos alternado y usar cada semana uno.
25 mascarillas recomendadas para cuidar las pieles grasas
VER VÍDEO
Los náuticos, el zapato estrella de la primavera
La crema reductora que actúa mientras duermes
Jennifer López y el mono vaquero que más estiliza
El vestido que aman las royals llega a Sfera