No hay tejido que apetezca más vestir en invierno que el punto. Suave, cálido y cómodo, hace ya tiempo que salió de sus categorías más populares—jerséis y cárdigans—, para convertirse también en protagonista de abrigos, vestidos, pantalones y sí, también faldas. La falda de punto, de hecho, es una prenda que siempre merece la pena tener en invierno, bien sea para llevar en looks de oficina, acompañada de jerséis a juego, camisas o americanas, y también siendo ideal para incorporar en los looks más formales.

Si bien las faldas de punto siempre acostumbran a aparecer en las firmas en versiones midi o, incluso, llegando hasta el suelo, este invierno la falda de punto se lleva en su formato mini.

Las minifaldas de punto han comenzado a aparecer sin cesar en el street style internacional, concretamente en Copenhague, donde ha logrado poner de acuerdo a editoras danesas y también asistentes españolas, como es el caso de Blanca Arimany.

la falda de punto mini
Getty Images
la falda de punto mini
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Aunque las versiones son infinitas, las faldas minis de punto más repetidas tienen en común sus tonalidades neutras y fáciles de combinar, como grises, beiges o marrones, dejándole así todo el protagonismo a lo interesante de su textura.

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Dónde comprar la falda de punto mini que está de moda

Además de tratarse de una prenda cómoda, la falda de punto es además de lo más asequible, pudiendo encontrarse versiones por menos de 30 euros en firmas como Zara o Mango.

Zara - Falda midi de punto con lana

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