Durante los últimos años, las críticas hacía Victoria's Secret por la falta de inclusión y diversidad de sus modelos se han multiplicado. Un hecho que se ha visto reflejado en sus propias ventas y que ha terminado por cancelar su espectacular show anual. Las pérdidas han sido tales que la compañía se ha visto obligada a implementar medidas para dar un giro radical a la imagen proyectada hasta ahora y sobrevivir a lo que parece el final.
El pasado mes de diciembre vimos como la marca apostaba por el body-positive en una campaña que sorprendía, no era habitual en sus anteriores líneas, y a la vez conquistaba a su público. Cuerpos reales donde ni las estrías ni la celulitis estaban ocultas y con los que se buscaba demostrar que sus nuevos diseños eran ideales para todo tipo de mujeres.
Una apuesta por la belleza real que se ha repetido esta misma semana con el lanzamiento de su campaña para primavera. En ella, mujeres de todas las tallas lucen sonrientes y con orgullo las piezas de esta nueva colección donde los atrevidos diseños repletos de encaje en rojo y negro, tan habituales en sus anteriores líneas, han dejado paso a otros más delicados en rosas y nude con los que se logra un efecto de "segunda piel" espectacular. Conjuntos de lencería que siguen siendo sexys y espectaculares y que sin embargo cuentan con la comodidad como protagonista, un aspecto muchas veces requerido a Victoria's Secret.
Un movimiento que viene a confirmar este gran cambio de estrategia por parte de la popular firma. Ahora solo queda esperar para saber si esto les permite seguir en lo más alto o si finalmente no consiguen mantener la empresa a flote.
