Es indiscutible que en los últimos años la preocupación por la nutrición y el objetivo de comer lo más natural posible (pocos son los que todavía no han leído u oído hablar del fenómeno real food o, en castellano, comida real, que ahora copa todas las redes sociales) ha aumentado y, lógicamente, el consecuente reflejo en el carrito de la compra y en la proliferación de establecimientos especializados. Según el informe Mitos y realidades sobre el consumo de productos ecológicos elaborado por Kantar Worldpanel y la Fundación Catalunya La Pedrera, en 2017 el consumo de productos eco en España subió en un 14%, un 12% más que el del resto de los alimentos. Y aunque todavía estamos muy lejos de la media europea (42% frente al 80%), Cataluña es la comunidad autónoma que más se aproxima situándose a la cabeza: los alimentos ecológicos ya ocupan su espacio en un 53% de los h0gares.
En la Ciudad Condal se nota ese furor healthy y bio que tan en boga está últimamente con solo pasear por sus barrios más céntricos. Pero no todos son lo mismo ni ofrecen el mismo producto de calidad que llegados a este punto del panorama, ya exigimos como consumidor aventajado en este sector. De ahí que Ametller Origen haya dado en la clave. Aparte de los puntos arriba comentados, se une el de la tradición. El nombre de este proyecto, que va más allá de un simple comercio, se debe a una saga familiar catalana que desde 1800 se han dedicado al cuidado y al cultivo de sus tierras.
Partiendo, así, de ese saber hacer, han creado una serie de supermercados y restaurantes ecológicos que en solo unos pocos años ya alcanzan a toda la comunidad autónoma, con un fin muy sencillo pero bien claro: contribuir a que la gente se alimente mejor.
Basándose en productos naturales y de proximidad, sus establecimientos son una fiesta para los sentidos. Desde frutos secos, repostería, quesería o carnicería hasta llegar a comidas preparadas (que ya quisieran nuestras abuelas) o productos de higiene. Todo, además, en superficies amplias, bien ordenadas, donde la sencillez y un estilo que podría recordar a un súper nórdico hacen que llenar la cesta de la compra sea un placer.
Pero, ojo, que para los que no tengan tiempo, también tienen tienda 'on line' siempre con productos frescos destacados diariamente. De hecho, también es una buena opción probar estas delicias antes en cualquiera de sus restaurantes donde, así mismo, los chefs están constantemente innovando (otro rasgo de la identidad de Ametller Origen a destacar) tomando el producto de temporada como protagonista.
Por último y por si fuera poco, están inmersos en un proyecto con comedores escolares para educar a los pequeños en la alimentación desde la más tierna infancia. Ellos se encargan de todo: gestión, comida, pagos... facilitando las cosas a cualquier centro interesado de la zona.
