Con motivo de la celebración de San Valentín, y aprovechando que en apenas unos días cumplirán dos décadas de matrimonio, los Reyes de Holanda han compartido una emotiva publicación en Instagram recreando aquel momento que marcó un antes y un después en su relación: la pedida de mano de Guillermo a Máxima.
"20 años después, mismo lugar", podía leerse junto a una imagen en la que ambos, sin perder la sonrisa y la emoción, han querido revivir la escena que tuvo lugar en el lago del palacio Huis ten Bosch en 2001. Un post que como no podía ser de otra manera, sobre todo teniendo en cuenta que se trata de una fecha tan significativa como el 14 de febrero, se ha robado el protagonismo de la red.
Aunque no solo ha sido la ternura o emoción que trasmitía la imagen lo que ha llamado nuestra atención, el look elegido por la consorte tampoco ha pasado por alto para los amantes del estilo cuidado y original de la Reina Máxima.
En esta ocasión, Máxima de Holanda ha dejado de lado las opciones llamativas y deslumbrantes habituales en sus looks casual, y que sin duda alguna se han convertido en parte de su esencia, para apostar por un sencillo plumífero largo en tono azul marino y pantalones vaqueros estilo campana o flare.
Se trata de una de las siluetas más repetidas en el panorama denim esta temporada, es favorecedora, alarga visualmente la figura y en este caso, con el hielo como protagonista, incluso se adapta a las botas elegidas por la consorte.
No es habitual ver a Máxima con este tipo de opciones denim, es posiblemente uno de los tejidos menos habituales en su armario -algo entendible teniendo en cuenta el protocolo real-, pero siempre que ha recurrido a ellos se ha llevado el aplauso del público. Esta ocasión no ha sido una excepción.
