Inevitablemente, el comienzo del año nuevo está plagado de un puñado de buenos propósitos, pero también de grandes dosis de incertidumbre: ¿Qué nos deparará 2024? ¿Será un buen año? ¿Conseguiré por fin ahorrar lo suficiente para la casa? ¿Esa oportunidad laboral que tanto espero se materializará por fin? ¿Me quedaré embarazada? ¿Encontraré el amor? ¿Reuniré el valor suficiente para romper con lo que me hace infeliz? ¿Logrará ese amigo o familiar vencer su enfermedad? Hay quien se maneja mal ante lo desconocido, le sucedía al diseñador Christian Dior que, en sus memorias, narra cómo en el distrito 16 de París, vivía Madame Delahaye, su tarotista más querida. “‘¡Acepte!’ me ordenó ella, ‘¡Acepte! Tiene que crear la Casa Christian Dior. Con independencia de cuáles sean las condiciones iniciales, ¡nada de lo que puedan ofrecerle más tarde es comparable a la oportunidad que se le presenta hoy!’, cuenta el diseñador que le interpeló Madame Delahaye cuando, tras un tiempo trabajando en la maison Lelong, acudió a ella en busca de una respuesta sobre las dudas que le planteaba crear su propia firma en solitario. La casa Dior se fundó en 1947 y, 74 años después, su colección de alta costura se inspiró precisamente en el tarot y la alquimia, como guiño definitivo a un rito fundamental en la vida de su fundador. Era enero de 2021 y la pandemia golpeaba todavía sin tregua, pero el mensaje era claro: un presente y futuro incierto habían de combatirse con una vuelta a la intimidad, la espiritualidad y la reflexión. María Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, recogió el guante y firmó una de sus colecciones más especiales, con película de Matteo Garrone.

Sí, el tarot lleva algún tiempo viviendo un dulce despertar y ni siquiera Zara, con su pasada campaña en colaboración con Fournier, ha podido resistirse al poder estético de los veintidós arcanos. A pesar de los siglos que estuvo envuelto en un halo tenebroso y sobrenatural, propio de superchería finisecular, se ha convertido en una actividad de autoconocimiento y reflexión. Su potencia estética y sensitiva es innegable y es, posiblemente, una de las prácticas que mejor combinan arte e intuición, espiritualidad y estética. De entre la multitud de libros que tratan sobre el tema, estas son algunas obras fundamentales para iniciarse en el tarot o, simplemente, disfrutar de su inspiración.

Libros fundamentales para iniciarse en el tarot

  1. Jodorovsky, A. (2006) Yo, el tarot. Poemario sobre los 22 arcanos. Alejandro Jodorovsky es, sin ninguna duda, el padre del Tarot moderno que desentraña, en este poemario, su visión estética de los arcanos mayores dándoles voz y espíritu.

    DEBOLSILLO Yo, el Tarot (Best Seller)

    Yo, el Tarot (Best Seller)

    DEBOLSILLO Yo, el Tarot (Best Seller)

    10 € en Amazon

    2. Costa, M. (2018). El tarot paso a paso. Debolsillo. “La maestra de los maestros del Tarot” es el título que se le ha otorgado a Marianne Costa desde hace años y, en esta obra, fruto de décadas de experiencia como tarotista y estudiosa en la materia, revisa las bases históricas, culturales e iconográficas del Tarot de Marsella para una interpretación coherente, “que hable al corazón del consultante”.

    Grijalbo El Tarot paso a paso: Historia, iconografía, interpretación y lectura (Crecimiento personal)

    El Tarot paso a paso: Historia, iconografía, interpretación y lectura (Crecimiento personal)

    Grijalbo El Tarot paso a paso: Historia, iconografía, interpretación y lectura (Crecimiento personal)

    3. Albert, S. (2022). El tarot de Leonora Carrington. RM Verlag. En la década de 1950, la pintora mejicana Leonora Carrington, colega de Miró, Picasso o Dalí, creó una espectacular baraja de los arcanos mayores superponiendo láminas de oro y plata sobre colores brillantes. El resultado fue un trabajo visual único, interpretado a través de una clara lente feminista.

    RM The Tarot of Leonora Carrington

    The Tarot of Leonora Carrington

    RM The Tarot of Leonora Carrington

    4. Nichols, S. (1989) Jung y el tarot, un viaje arquetípico. Kairos. Interpretación del Tarot en términos de psicología jungiana a través de la analogía con las humanidades, la mitología y las artes visuales.

    KAIRÓS Jung y el tarot: Un viaje arquetípico (Psicología)

    Jung y el tarot: Un viaje arquetípico (Psicología)

    KAIRÓS Jung y el tarot: Un viaje arquetípico (Psicología)

    5. Crispin, J. (2022) El tarot creativo. Una guía moderna para una vida inspirada. Alpha Decay. Un recorrido actual por el Tarot, sus usos e influencia en la autora, Jessa Crispin, una de las más influyentes pensadoras del movimiento feminista y crítica literaria.

    EDICIONES ALPHA DECAY S.A EL TAROT CREATIVO: Una guía moderna para una vida inspirada: 118 (ALPHA DECAY)

    EL TAROT CREATIVO: Una guía moderna para una vida inspirada: 118 (ALPHA DECAY)

    EDICIONES ALPHA DECAY S.A EL TAROT CREATIVO: Una guía moderna para una vida inspirada: 118 (ALPHA DECAY)

      Y, para quien quiera pasar a la práctica, merecen mucho la pena algunos como los de The Singular Olivia, ilustrado por Laura Pacheco, con instrucciones y una breve guía de interpretación que, además, está contenido en una caja-tablero con la que completar el ritual en el caso de que se quieran guardar aceites esenciales, minerales y velas; o los de Fournier, que distingue entre los clásicos y los tarot de autor, con casi 18 variedades y algunos tan llamativos como el dedicado a Frida Khalo.

      los secretos del tarot
      Unsplash / Edz Norton

      ¿Brujería o auto conocimiento?

      El escepticismo lógico que despierta este tipo de prácticas se despeja con una nueva lectura de sus planteamientos: más allá de la bruja-pitonisa, la lectura del Tarot tiene más que ver con la mujer como intérprete intuitiva, una especie de guía de emociones, de acompañante espiritual. Marianne Costa, en su obra El Tarot paso a paso, asegura que su lectura no es la lectura de un “catálogo de cartas”; al contrario, “lo que constituye la riqueza de una lectura del tarot son los vínculos entre las cartas y, a la vez, la relación entre las personas que las interpreta, la persona que consulta y la pregunta planteada”. Ni siquiera ella aboga por el tarot predictivo sino por la versión terapéutica (tarot evolutivo), que permite a quien consulta un momento de autorreflexión. Es, de alguna forma, indagar en el porqué de las respuestas que los naipes nos ofrecen más que el resultado de una profecía autocumplida. ¿Y si lo que nos depara 2024 depende solo de nosotros?