Farrah Fawcett fue y será siempre un icono. Y es que, a pesar de que pasen los años su estilo años setenta en su máximo esplendor es aclamado en todos los rincones del mundo. Y también imitado, especialmente a lo que su melena se refiere. Si su estilo ha sido siempre aclamado, mucho más lo ha sido su pelazo rubio cargado de volumen. De hecho, esta temporada se ha decidido rendirle todo un homenaje.
Sí, este otoño vas a dejarte crecer la melena y te la vas a tener que cortar a capas porque el pelo de Farrah Fawcett es tendencia. Ya lo hemos empezado a ver de la forma más natural, adaptándose a los looks más actuales por los pasillos de Instagram. Y no es de extrañar porque esa melena ondulada y con flequillo espeso semi abierto resulta de lo más favorecedor.
Eso sí, lo cierto es que hay que tener cierta materia prima, es decir, pelazo, ya de por sí para poder conseguir este peinado de Farrah Fawcett y que las capas den todo el volumen deseado. Pero que no cunda el pánico porque no se lleva solo exactamente calcado, de hecho es más bien la esencia del peinado de la actriz lo que se ha puesto de moda.
No es necesario que tiñamos nuestro pelo de rubio, de hecho puede llevarse también moreno, con reflejos, en balayage o como llevemos el pelo ahora mismo, solo hay que conseguir las ondas que protagonizaban el peinado de Fawcett y darle un poco de volumen a la melena y aspecto setentero.
Aunque no lo parezca, es sencillo de conseguir. Lo básico es tener el pelo largo o por los hombros para poder moldearlo. Este debe ir cortado a capas, no demasiadas pero sí marcadas para que el pelo tome volumen y las ondas permanezcan. Después, nada más salir de la ducha, secaremos ligeramente el cabello con difusor en el secador, pero mientras continua un poco húmedo haremos las ondas con un cepillo redondo de púas y el secador. La clave está en hacer ondas grandes y hacia fuera. Lo ideal sería combinar con un rizador y después deshacer la onda con el cepillo para que no quede demasiado marcada. Después pon la cabeza hacia abajo y da un golpe de aire. Por último fija el resultado con una laca que aporte volumen también y carda ligeramente la raíz.
