El verano empezó con los bolsos de mimbre ya más que asentados desde el principio de la primavera. Poca duda quedaba sobre aquello de que, en 2017, todas queremos ser Jane Birkin paseando los capazos por la ciudad; después, llegó la redecilla, más conocida (sobre todo internacionalmente) como fishnet bag. Esa bolsa de imagen retro que antaño sirvió para hacer la compra y que ahora hace las veces del perfecto complemento del verano sobre arena de playa o asfalto a más grados de los que debería. Ambos introducían la idea de que este verano los bolsos estrella no tenían que ver con grandes marcas, sino que serían rescatados de armarios de abuelas o tiendas vintage. Y, si a estas alturas ya te has hecho con ellos, ve abriendo hueco en el armario (y en tu maleta de vacaciones) porque ahora, Instagram mediante, el jelly bag también vuelve con fuerza y reclamando el (divertido) protagonismo que se merece.

instagramView full post on Instagram


Puede que no te suenen te nada, que te parezcan el bolso de las Polly Pocket o que te traigan, de repente, recuerdos de tu infancia a todo color. Se trata de cestos de plástico, rígidos y con asas que tuvieron su gran momento en los ochenta y noventa y que, ahora, intentan aportar su pequeña dosis a esta explosión de nostalgia rentable que nos invade desde hace algunos años.

Al ser tan coloridas y dejar a la vista el interior del bolso, pueden resultar ‘demasiado’ para muchos; pero lo cierto es que su aire entre lo kitsch y lo infantil hace que se inserten perfectamente en estilismos veraniegos con cierta inspiración vintage. Quizá por eso influencers nacionales como la estilista María Bernad (@maria_bernad) o Vanessa Rosa (@peggyheart) han sabido llevarlo a la práctica sin problema, combinado con vestidos midi estampados (los clásicos tea dresses) , vaqueros y tops con los hombros al aire o, por qué no, estilismos minimal a todo color como el elegido por Bernad.


¿Dónde encontrarlos?

Posiblemente te topes con ellos en más de una tienda de segunda mano, si es que no guardas todavía en el trastero de casa de tus padres el que utilizabas para guardar muñecos en tu infancia. Si no, la marca británica Sun Jellies los fabrica a partir de materiales reciclados en todas sus formas y colores, junto con las famosas cangrejeras de plástico que también tuvieron su gran comeback en el verano de 2013. En Madrid, por ejemplo, puedes hacerte con ellas en la tienda Afortunadamente (C/ Espíritu Santo, 38).


Puede que esto quede en un mero capricho veraniego o que, realmente, los jelly bags consigan volver a las calles en lo que queda de temporada; si no, ¡siempre les quedará la playa…!