La pasarela ya lo dijo en septiembre. “Oye, que mira, que te vayas haciendo a la idea de que la primavera que viene vestirás pastel”. Por si acaso alguien todavía no tenía muy claro el cómo dejar de lado el negro de pies a cabeza… Y, ahora, la alfombra roja empieza a teñirse también de las tonalidades más románticas de la paleta. El pasado lunes, en la gala de los Fashion Awards celebrada en el Royal Albert Hall de Londres, cuatro de sus invitadas más importantes apostaron por la tendencia cromática más esperada de la próxima temporada: Selena Gomez, de la mano de Coach en color amarillo pastel; Winnie Harlow en verde menta; y Kaia Gerber de Versace y Alexa Chung de su propia marca, en azul. Todas, en un arcoíris ligeramente desaturado.
El rosa, rey indiscutible de los tonos delicados, se hizo con la pasarela y nuestro armario el pasado verano, anticipándose a la tendencia del vestuario más cupcake. Ahora, los malvas invaden las tiendas high street en jerséis de punto y vestidos para dar paso también a los amarillos, verdes y azules en cuanto empiece a oler a primavera.
En las últimas semanas de la moda, vimos pastel en sus diferentes colores en desfiles como el de Christopher Kane, Emporio Armani, Valentino, Sportmax, Sies Marjan, Versace (sacando su lado más ochentero), Michael Kors o Victoria Beckham. Parece que la diseadora británica, después de abrir su armario a los colores primarios más vivos el pasado verano (la vimos en rojos, azules, amarillos), ahora dará rienda suelta a su faceta más dulce enfundándose en violetas, rosas y colores crema.
De momento, con la fiebre por los estilismos de las fiestas que están por llegar, los estantes de tus tiendas favoritas están cubiertos de lentejuelas y terciopelo en colores clásicos de la noche. Sin embargo, en las precolecciones y en los avances de las próximas temporadas empiezan a caer con cuentagotas piezas perfectas para empezar a construir (adelantándote) el armario más ‘pastelón’. ¿Te apuntas a esta?
