El colosal imperio de Rihanna crece a buen ritmo. Este lunes, la cantante de Barbados presentaba en el Macy's de Brooklyn (Nueva York) su octavo perfume, RiRi: Una mezcla de rosa, jazmín, madreselva y azahar que abraza la esencia de su creadora. Esta decía haber supervisado todo pormenor del proceso, como siempre que su nombre se emplea con fines comerciales. No son pocas las veces que esto ocurre. Rihanna –de sólo 27 años– cuenta con más propósitos que tiempo: este año se estrena como directora creativa de Puma, planea nuevo álbum –del que sólo conocemos ese himno bautizado Bitch better have my money– y, ahora, creará también su propia línea de cosméticos. Así lo comunicaba en el evento celebrado en Macy's.

"He querido hacerlo siempre, sólo que nunca era un buen momento", exponía en exclusiva a Refinery29. "Nunca dejaré de estar ocupada, con muchas cosas entre manos. No obstante, tenía que hacerlo". El sueño por fin adquiere hechura. Tras RiRi, la cantante pierde el miedo a experimentar en otras áreas. Sus productos incluirán "pestañas postizas fáciles de poner, barras de labios que no se muevan ni resequen y muchas otras cosas que en principio suenan irreales e imposibles". En principio. Si alguien sabe de llevar imposibles a buen puerto, esa es Rihanna.