"Cuando el río suena..." es una de las grandes frases que merodean la moda en los últimos años. Rumores que se confirman, entradas, salidas... un baile de sillas que no parece tener intención de dar tregua a corto plazo. El último gran movimiento ha sido protagonizado por Riccardo Tisci: según anuncia en exclusiva el portal WWD, el italiano suelta las riendas de Givenchy después de más de una década como director creativo.

Tengo un cariño especial por Givenchy y su maravilloso equipo. Quiero agradecer a LVMH y a Bernad Arnault por cederme la plataforma en la que expresar mi creatividad a lo largo de estos años. Ahora me gustaría centrarme en mis intereses y pasiones personales”, sentencia el diseñador en un comunicado recogido por Business of Fashion. Al parecer, tras meses de rumores, su salida se hizo efectiva el pasado 31 de enero, coincidiendo con el vencimiento de su contrato con la maison. Por su parte, desde el grupo de lujo que posee Givenchy, Arnault ha agradecido públicamente a Tisci por su gran aportación a la casa que fundada en 1952.

Con la Semana de la Moda de París a la vuelta de la esquina, se confirma también que, con motivo de esta separación ("mutua y amistosa", matizan fuentes a WWD) la firma no presentará el próximo mes de marzo sus propuestas para la temporada Otoño-Invierno 2017/18. Así, las últimas creaciones de Tisci para Givenchy serán las exhibidas el pasado 20 de enero en la capital francesa, en un desfile que aunaba su colección masculina y de Alta Costura.

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Formado en la londinense Central Saint Martins, Riccardo Tisci entró a Givenchy en 2005 después de haber trabajado, entre otros, para Puma. Tras un viaje a la India, el diseñador italiano se volcó en su primera colección propia, presentada en 2004 en Milán y promovida, principalmente, por el boca a boca de modelos y amigas como Mariacarla Boscono, su primera gran musa. Fue tal su reconocimiento que apenas un año después fue nombrado director creativo de Givenchy, casa por la que habían pasado las agujas de John Galliano, Alexander McQueen y Julien McDonald después de que en 1995 su fundador, Hubert de Givenchy, abandonara la firma.

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Fue el Givenchy de Riccardo Tisci el que dio vía (casi) libre a Kim Kardashian y su ’klan’ para entrar en la industria de la moda. En la imagen, Riccardo junto a Kim, Kanye, North West y Kris Jenner al final de uno de los desfiles de la casa en París. @Getty Images

A lo largo de estos 12 años (relación de las que hay cada vez menos en la ahora-muy-rápida industria de la moda) las creaciones de Tisci se han caracterizado por su peculiar visión de la sensualidad, bañadas siempre de un toque gótico (consecuencia de las fuertes creencias religiosas en las que se crió) que ha encandilado a grandes nombres de todos los ámbitos. Madonna, Liv Tyler o Marina Abramovic son algunas de las mujeres que han sido fieles a la casa en la etapa Tisci; sobre la alfombra roja, actrices como Amanda Seyfried o Rooney Mara han encontrado su estilo personal gracias a los diseños del italiano para Givenchy. ¡¡¡Y cómo olvidarnos de Kim...!!! Porque si hay que culpar a alguien de la presencia de la líder Kardashian en el mundo de la moda, ese es Riccardo. Él y Carine Roitfeld consiguieron a Kimberly una entrada exclusiva a una industria que al principio parecía reticente a tomarla en serio. Y entonces llegó la gala del MET de 2013 y el creativo la vistió, embarazada, con un diseño repleto de flores...

Ahora, con el anuncio de su salida de la maison, será inevitable esquivar los rumores que, desde hace semanas, apuntan al posible movimiento de Riccardo Tisci a Versace, la firma de su amiga Donatella. Hasta que la estrategia se confirme (y haga de ellos la pareja más fuerte de la moda italiana), sonarán también las apuestas en torno a quién será el sustituto del italiano a la cabeza de Givenchy. El tiempo dirá.

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Tisci posa con Donatella Versace y Naomi Campbell el pasado mes de septiembre en el Festival de Venecia. © Getty Images