El 'polémica' podría ser su segundo nombre. A veces con razón y otras muchas no. Fumar marihuana en unos premios musicales sí es polémico. Como también es polémico que muestres un pecho en público (intencionadamente o no) en ese país de ironías y contradicciones que es Estados Unidos. Ahora, que una mujer famosa –con las acepciones que implica tal término– de veintidós años aparezca en actitud provocativa en una campaña publicitaria no debería ser considerado un suceso polémico. Publicidad es ficción y ventas, nada más. Cyrus se convertía en imagen de MAC para su campaña Viva Glam en enero de 2015. Los anuncios, renovados, forraban marquesinas internacionales a comienzos de septiembre. Escasos treinta días después, explosiona el contratiempo. La ASA –Advertising Standards Authority–, empresa reguladora independiente de Reino Unido de la publicidad en los medios, recibía estos días tres quejas sobre el anuncio de MAC protagonizado por la cantante natural de Tenesse. El achaque: ser "demasiado sugerente". ¿Son sugestivas unas piernas abiertas? No. Y no lo decimos sólo nosotros.

La noticia era publicada por el diario inglés The Telegraph. Tras un análisis de la campaña, las autoridades británicas han considerado que el cartel de Cyrus no se opone a la normativa existente. La publicidad en cuestión ni muestra un desnudo ni está situada en torno a escenarios sensibles como colegios u organismos institucionales. Desde MAC, la defensa no cesa: El anuncio, pensado para recaudar dinero en socorro del virus del VIH, muestra a Cyrus en una pose "confiada", que no "sugerente". Desafiante, quizá. Otra vez, parece que el conflicto radica más en los ojos que atienden a las instantáneas.

"Si bien es cierto que consideramos que las imágenes de los tres carteles son sexualmente sugestivas, llegamos a la conclusión de que no son lo suficientemente explícitas. Es poco probable que la campaña cause ofensa de forma seria y generalizada", comunicaba finalmente la ASA. Un tanto que anotan Cyrus y la liberación.