Si algo funciona, por qué cambiarlo. Algo símil debió pasársele por el cerebelo a Melania Trump en el acto organizado ayer por el partido de su marido, ergo la Convención Nacional Republicana. La futurible primera dama de los Estados Unidos se subió al estrado para elogiar los valores y aptitudes de su marido, un gesto de cariño que en ello se habría quedado si no fuera por un pequeño detalle: el discurso contenía declaraciones exactas a las que Michelle Obama hiciera en honor a Barack en la convención de su partido rival, ya en 2008.
Nada que no se diga en una cita inspiracional de este calado: "Has trabajar duro para conseguir lo que quieras en la vida (…) y asegurarte de que tu palabra es el nexo, que haces lo que dices que vas a hacer (…) y que tratas a la gente con dignidad y respeto". ¿Casualidad o incidencia? Ese mismo día, en una entrevista con el canal generalista MSNBC, Trump aseguraba que su esposa era la única responsable de las palabras que pronunciaría Melania posteriormente, pero a tenor de lo ocurrido, ni éste ni el Partido Republicano de Estados Unidos ha dado ninguna información adicional.
ACTUALIZADO: Ante la polémica, el equipo de Trump ha emitido un comunicado —o más bien un texto en un bloc de notas tuiteado en la cuenta de Melania– donde su jefe de comunicaciones, Jason Miller, afirma:
Para escribir su precioso discurso, el equipo de escritores de Melania Trump tomó anotaciones de sus inspiraciones, incluyendo en algunos casos fragmentos que reflejan su propio pensamiento. Su experiencia como inmigrante y amor por América brilló durante todo su alegato, el cual fue un absoluto éxito.
