En plena Semana de la Moda de Nueva York, Tommy Hilfiger ha sido la última firma en sumarse a la reestructuración de la relación pasarela cliente. Según confirma el medio Business of Fashion, a partir de septiembre de este año, Hilfiger apostará por una emisión multimedia de su desfile con tintes más interactivos –ya avisó que incluiría el 'InstaPit', zona exclusiva para 'Instagrammers'– con la intención de acercar las prendas a los usuarios de forma inmediata. La novedad radica en que Hilfiger presentará en su desfile piezas de la colección cápsula 'TommyXGigi' en colaboración con la supermodelo Gigi Hadid. Dichas piezas estarán disponibles (imaginamos que por poco tiempo dado el indudable tirón que tiene Gigi) en las boutiques de la firma, su tienda online así como en cadenas multimarca, justo al finalizar el desfile.

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"Durante más de 15 años hemos creado una fusión entre entretenimiento y moda. Esto nos da la plataforma perfecta para expandir este concepto", declaraba el diseñador Tommy Hilfiger para Business of Fashion. Una propuesta eficaz para seguir exprimiendo una firma ya de por sí rentable y mediática, que alcanzará la reconversión total cuando en febrero de 2017 presente sus propuestas de primavera –unas propuestas más atemporales de a lo que estamos acostumbrados– y ponga a la venta de forma inmediata la totalidad de la colección.

En definitiva, un paso más en esta nueva etapa que está experimentando el mundo de la moda y que recientemente nos dejaba cambios sustanciales en el calendario tradicional de pasarelas.

Todo comenzaba cuando Christopher Bailey, director creativo de Burberry compartía la semana pasada sus planes de reestructurar las apariciones de la firma en la Semana de la Moda de Londres. El buque insignia de la moda británica apostaba por virar hacia un contexto más global al sustituir sus cuatro desfiles anuales (Primavera-verano y Otoño-invierno tanto para hombre como para mujer) por dos colecciones atemporales que aunque coincidirían en fechas –'Septiembre' y 'Febrero' son los nombres elegidos– buscarían reinventarse al mezclar diseños tanto de la línea masculina como de la femenina sobre una misma pasarela.

No se trata de un simple lavado de imagen sobre la pasarela. Las modificaciones pretenden incidir a su vez en los tiempos de venta, ya que tal y como ha confirmado la casa Burberry, estas prendas estarán disponibles de forma inmediata tras el desfile tanto en tiendas físicas como a través de internet. Una manera de recortar distancias entre diseño y utilidad, reducir la agónica espera y amortizar toda la expectación y promoción que se genera en torno a estos actos.

Sin embargo, esta ruptura con el sistema tradicional de modas ha resultado no ser ocurrencia exclusiva de Burberry. Tom Ford también se ha sumado a esta nueva concepción de las pasarelas a través de un comunicado de prensa "Hemos estado viviendo con un calendario y un sistema de pasarelas que es de otra era. Hoy nuestros clientes quieren una colección que esté inmediatamente disponible. Los desfiles y el calendario tradicional, tal y como los conocemos, ya no funcionan de la manera en la que una vez lo hicieron".

Un presagio oscuro que ha desencadenado un efecto dominó que hoy también se extendía hasta Vetements, firma del actual director creativo de Balenciaga, Demna Gvasalia, quien también pretende reducir su número de desfiles para dosificar la creatividad, unificando las colecciones masculinas y femeninas en un único espectáculo celebrado, como no, en París.

Michael Kors hará lo propio. El diseñador, que presentará su colección de Otoño-Invierno 2016/2017 el próximo miércoles en Nueva York, anuncia que parte de su propuesta –ocho piezas de ready-to-wear, zapatos y bolsos– estarán disponibles de inmediato vía web y en su tienda de Madison Avenue. "Mi actitud es, ella (la compradora) no presta atención a las estaciones de todos modos, ¿así que por qué no comprar y listo?", razona para WWD.

Tampoco el milanés Marcelo Burlon parece estar conforme con la panorámica vigente. Burlon, consciente de la nueva etapa que está experimentando la industria de la moda, se suma al vórtice de permutas en el calendario tradicional de pasarelas. El diseñador presentará su colección de otoño-invierno 2016/2017 en formato vídeo y con el soporte de recursos fotográficos. Así Burlon optimizará su presupuesto. “Hemos nacido con las redes sociales y para nosotros son herramientas de comunicación fundamentales”, cuenta.

Todavía no sabemos si esta apuesta por reestructurar drásticamente el calendario de pasarelas se extenderá a otras firmas de renombre, pero lo cierto es que se trata de un cambio que viene fraguándose desde hace tiempo, tal y cómo adelantábamos a finales de enero. De cualquier manera, queda latente la preocupación de diseñadores como Tom Ford, quien en su defensa ha alegado "invertir grandes cantidades de tiempo y energía para hacer posible un evento que crea expectación con demasiada antelación, si tenemos en cuenta la disponibilidad de la colección". ¿Estamos ante la revolución de la inmediatez en el mundo de la moda?