Andreja Pejić fue descubierta como modelo antes de cumplir los diecisiete años mientras trabajaba en un McDonald's de Tuzla, su ciudad natal. Por aquel entonces, Andreja todavía era un hombre, pero su particular androginia le hizo modelar con éxito tanto ropa masculina como femenina. No fue fácil. La modelo bosniocroata tuvo que demostrar su valía sin saber siquiera quién y cómo quería ser – "Hay mucha alegría y mucho dolor en un proceso de transición así. Siempre supe que quería ser mujer, pero eso no facilitó las cosas", confesaba recientemente a Dazed. Hoy, un año después de que se sometiese a la operación que le cambiaría la vida definitivamente, Andrej(A) está lista para trasladar su historia a la gran pantalla.

El director del film es Eric Michette, un amigo cercano de Péjic. "Nunca pensé en grabar mi vida, mi día a día. Pero Eric pensó que debíamos capturar todo lo que me estaba sucediendo. Un documental siempre es muy real, no es una superproducción, no hay grandes dosis de edición o planificación". La financiación de la película en Kickstarter –un sitio web de financiación en masa para proyectos creativos tales como películas independientes, música, revistas o videojuegos– ha conferido a Pejić cierta tranquilidad pues el control creativo de la cinta dependerá fundamentalmente de sí misma. Desde que apareciese por primera vez en la escena pública en 2011, cuando el diseñador Jean Paul Gaultier la incluyó como modelo en sus colecciones masculina y femenina, Andreja no ha parado de recibir halagos y un documental así, "es un regalo más", confiesa.

La película, que recogerá los primeros 18 meses de vida de la modelo como mujer, se estrenará al tiempo del Festival de Sundance, una buena forma de normalizar la transexualidad. "Muchas veces, cuando veo fotografías antiguas, me imagino a mí misma sola en el futuro. No sé por qué me cuesta imaginarme envejeciendo con alguien. Cada vez menos, es verdad. Afortunadamente el mundo está cambiando y, de un tiempo a esta parte, he vivido experiencias muy positivas y enriquecedoras", sentenciaba. La aceptación terminará llegando – pero, por si acaso, Caitlyn Jenner y su reality I Am Cait irán acondicionando el terreno para que realidades como estas no necesariamente deban ser grabadas.