Cuando por la mente de Letizia ni se asomaba la idea de que un día sería la Reina de España, ella ya pisaba tierras mexicanas. Entonces, en 2001, cuando aún era estudiante, lo hacía para realizar un máster. Ahora, 16 años después lo hace para menesteres bien distintos, como reforzar las relaciones entre ambos países en calidad, ahora sí, de Reina consorte.
Lo cierto es que doña Letizia se ha convertido en una excelente relaciones públicas para la corona y allá donde el Rey no puede estar, está ella. Y claro está, como es costumbre, lejos de su agenda estrictamente protocolaria, está la eterna pregunta de los críticos de moda: ¿qué se va a poner?
Duda despejada. En su primer acto, más solidario que politico, Letizia llevó un total look de Hugo Boss que, aunque no ha sido de los más favorecedores, no ha desentonado. Eso sí, por encima del look esta vez ha brillado (y nunca mejor dicho) un complemento: los pendietes de Chanel. Se trata de unas joyas que llevan ya muchos años en el joyero personal de Letizia y con las que ya la hemos visto en más de una ocasión. Estos pendientes en forma de estrella fueron un regalo que le hizo la maison en 2005 por el nacimiento de doña Leonor. Desde entonces, han pasado a formar parte de sus preferidos.
Por la tarde, Letizia acudió a una reunión con el presidente Enrique Peña Nieto y su mujer en la redidencia oficial con un look sobrio pero aplaudido. La Reina optó por un mono negro con el cuello halter bordado, de Felipe Varela, con el que ya la hemos visto en varias ocasiones, y una coleta ondulada.
