Estos son los 10 vestidos de lino más bonitos para primavera y verano y que funcionan de los 20 a los 60 años

No hay tejido más veraniego que el lino. Su naturaleza fresca y liviana hacen de él la mejor opción para los días más calurosos. Más allá de su innegable carácter estival, el lino es un tejido lleno de cualidades como su resistencia, haciendo que las prendas de este tejido tengan una vida más larga, además es antibacteriano, transpirable y también una de las fibras más sostenibles que existen, ya que requiere de menos agua para crecer y su cultivo no necesita de pesticidas. Por ello, su protagonismo cada primavera y verano está más que asegurado y, en un momento en el que la plancha no es imprescindible, su tendencia arrugarse parece no ser algo que importune a nadie a estas alturas.

El lino se erige de nuevo como protagonista indiscutible de la temporada más cálida del año y lo hace no solo en una categoría, sino en una amplia gama de prendas, desde impecables trajes de sastrería hasta pantalones anchos, pasando por faldas o chalecos. Sin embargo, si hay una prenda que reina sobre las demás, esos son los vestidos de lino. El vestido de lino es la prenda del verano por antonomasia. Tan elegante como informal, se presenta como un elemento esencial en el guardarropa veraniego, junto con los vestidos camiseros o los vestidos de flores. De nuevo, ha aparecido en numerosas pasarelas, pasando de clásico atemporal a tendencia. Ejemplo de ello fueron las colecciones de firmas como Staud, Philosophy di Lorenzo Serafini o Ludovic de Saint Sernin, entre otras muchas. Curiosamente, y aunque el vestido de lino se adapte a todo tipo de formas, colores y estampados, sobre las pasarelas el blanco crudo fue el color predilecto para esta prenda.

Los 10 vestidos de lino más bonitos de las firmas de moda