La desigualdad de género es algo evidente en el siglo XXI. Salarios inferiores ocupando el mismo puesto de trabajo, políticas discriminatorias, conductas y tradiciones machistas en la mayoría de las culturas. En conclusión, el género femenino sigue sufriendo inferioridad en el ámbito social, económico y político.

Sin embargo, estas frases son solo una forma de recordar una realidad que sigue latente en 2016, en un primer mundo que se define como liberal, progresista y democrático. Y, para corroborarlo, basta con hacer un pequeño estudio de mercado (aunque es solo una muestra de algo que ocurre en casi todos los ámbitos de la vida). En este caso, la encargada de mostrar unos resultados delatadores de esta injusticia ha sido Idealo, la web líder en comparación de precios.

El estudio revela la asombrosa diferencia de precio existente entre la versión masculina y femenina de un mismo producto. La famosa tasa rosa es un tema que constantemente está en el foco de la noticia, más aún desde que la Oficina de Consumo de de la ciudad de Nueva York hiciese un informe mucho más exhaustivo, movilizando masas en las redes sociales a con hashtags como #pinktax o #gendertax.

Ahora, Idealo publica un informe a partir de un estudio realizado en torno a tres tipos de productos: fragancias (que incluye perfumes y aguas de colonia), zapatos y relojes de pulsera. Los resultados revelan que los productos femeninos cuestan entre un 7 y un 24 por ciento más que la versión masculina de los mismos.

En fragancias, la diferencia es clara. El análisis se ha llevado a cabo con más de cien fragancias de 38 marcas conocidas y los resultados hablan por sí solos. La media, una vez analizados todos los precios, revela que las aguas de colonia y perfumes femeninos son un 7% más caros que los dirigidos a hombres. Esto, para que nos hagamos una idea, supone una media de 2€ más en cada producto. De todos los modelos analizados, solo el 12% del total se correspondían con un mismo precio para hombres y mujeres.

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Pero si la desigualdad es evidente en cosméticos y artículos de belleza, los datos sobre productos de moda no son más consoladores. Al analizar el ámbito del calzado, el proceso fue algo más difícil, ya que es casi imposible realizar una comparativa directa en productos con la misma denominación. Finalmente, analizaron decenas de zapatos cuya composición y producción fuesen similares en su versión masculina y femenina: borceguíes, mocasines y botines. Los resultados, al igual que en las fragancias, favorecen al género varonil. Los zapatos de mujer son más caros que los de hombre: un 3% más los borceguíes, un 6% los mocasines y un 7% los botines.

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Por último, el caso de los relojes es el más devastador. Al existir grandes diferencias entre los modelos diseñados para mujer y para hombre, Idealo analizó a tres grandes fabricantes, con miles de artículos tanto para hombre como para mujer. Una de las tres marcas vendía sus productos en un 24% más caros para mujeres que para hombres.

Pero, ¿tenemos estos datos en cuenta a la hora de adquirir unos u otros productos? ¿hasta qué punto somos conscientes de que estamos pagando hasta un 24% más por el simple hecho de ser mujeres? Al fin y al cabo, lo preocupante de este estudio es que sus datos reflejan una desigualdad que, por desgracia, no solo existe en el ámbito de las ventas o los productos de moda.