Jäger... ¿Qué?

Sí, Jägermeister. Se trata de un licor de hierbas elaborado a partir de 56 ingredientes cuidadosamente seleccionados y siguiendo la misma receta original desde hace más de 80 años. Esta receta es tan secreta como la de la Coca Cola, tanto que, la llave de la habitación donde se guardan todos sus ingredientes, está en manos de una sola persona.

La empresa Mast-Jägermeister SE es originaria de Wolfbüttel (Alemania). Sin embargo, este curioso licor ha dado la vuelta al mundo. Tanto es así, que según estudios, se calcula que en todo el planeta se beben 97 chupitos de Jäger por segundo. Su personalidad, auténtica y poco convencional, hace que la marca siga su propio camino, dejando de lado modas y tendencias.

El secreto mejor guardado

La receta original de Jägermeister se guarda en secreto, solo una persona tiene en sus manos las llaves de la habitación donde se guardan todos los elementos. Sin embargo, sí se sabe que es un licor elaborado a partir de 56 ingredientes naturales, entre los que se incluyen especias, hierbas, frutos y raíces orientales. Canela, jengibre, clavo, regaliz, anís, naranja amarga y bayas de enebro son algunos de estos componentes.

Pero la materia prima no vería el estrellano sin unos recursos humanos extraordinarios. Así, son los maestros destiladores los que hacen posibles la existencia de Jägermeister. La calidad del producto final no es aleatoria: el líquido contenido en cada botella se somete a 383 controles de calidad antes de salir de la planta de elaboración.

Una historia apasionante

Este producto pertenece a la empresa Mast-Jägermeister SE, una empresa familiar alemana fundada en 1878.

Curt Mast era un apasionado de la caza, los bosques y la naturaleza, y decidió dedicar su nueva bebida a los numerosos cazadores que poblaban la región por aquel entonces. Por ello, eligió el nombre de Jägermeister (maestro cazador, en alemán) y la imagen del ciervo de San Huberto con la cruz entre sus astas como logotipo.

Además, la estética del conjunto, como la distintiva botella verde o el propio licor de hierbas, hace alusión a los bosques y la naturaleza.

Beberlo como Jäger manda

Frío, frío, casi helado. La mejor manera de beberlo para disfrutar del auténtico sabor es muy frío, (-20º), directamente del congelador. De hecho, para garantizarlo, la marca cuenta con sus Tap Machines, las primeras máquinas dispensadoras únicas en el sector creadas en 1933.

Para los amantes a los combinados, Jagërmeister ofrece múltiples posibilidades para servirlo como cóctel. Eso sí, huyamos de la mezcla con bebidas energéticas y probemos la combinación con zumo de naranja o limón, soda o ginger ade.