El divorcio, cosa de ricos. Grosso modo, un juicio rápido –de no más de 5 horas– por separación o descasamiento en el estado norteamericano de California puede tener un costo de 1.900 dólares, más el acuerdo al que se llegue con la otra parte. Así lo indica la página web especializada divorce360.com. El precio del litigio ascenderá cuanto más sonada sea la ruptura –esto es, cuanto más famosa sea la pareja rota– y cuanta más experiencia tenga la abogada empleada. Detrás de cada divorcio importante en Hollywood está la misma mujer: Laura Wasser, de 48 años, la letrada favorita de las estrellas. Wasser, conocida dentro y fuera de los juzgados como “the disso queen”, la reina de las disoluciones en castellano, cobra mínimo 850 euros la hora y exige una fianza previa de 25.000 dólares por caso. Tanto o más pagó el actor Johnny Depp a la jurista por su defensa en el contencioso contra Amber Heard. Wasser tuvo también la última palabra en el divorcio de Jennifer Gardner y Ben Affleck; o en el de Maria Shriver y Arnold Schwarzenegger, en el de Denise Richards y Charlie Sheen… Entre los clientes de la licenciada favorita de TMZ están, asimismo, Tom Cruise, Steven Spielberg, Clint Eastwood y Melanie Griffith. Razón: Wasser es especialista en conseguir los acuerdos más ventajosos para sus clientes cuando hay que repartir una gran fortuna.

La próxima que manipulará será la de Brad Pitt y Angelina Jolie. Jolie ya contó con Wasser hace unos años cuando la llamó para que se encargara de la disolución de su matrimonio con Billy Bob Thornton, en 2003. Con la célebre letrada los resultados suelen ser satisfactorios; es directa y realista, dicen. “Si quieren que les diga que sí a todo, que vayan a ver a otro para que después el juez les diga que no medio millón de dólares más tarde. O pueden venir a mí para que les dé una buena dosis de realidad”, comentó ella misma a los medios una vez. Aunque presume de discreción, la buena sintonía de Wassern con Harvey Levin, el dueño de TMZ, hace sospechar sobre si ella es quien filtra los documentos oficiales a los que tiene acceso el portal web en exclusiva. Para no correr el riesgo de no cobrar, la letrada tiene una condición: sus clientes deben tener una fortuna mayor de 9 millones de euros.

El título de uno de los libros de Wasser, “No tiene por qué ser así: Cómo divorciarse sin destruir la familia o arruinarse”, bien podría ser una declaración de intenciones en el caso Brangelina. En juego hay más de 500 millones de dólares y seis hijos.

Las últimas noticias que se conocen apuntan a que Pitt está dispuesto a luchar por su matrimonio y a someterse a distintos tratamientos. Jolie, sin embargo, está decidida a continuar con el divorcio. La actriz de 41 años quiere conseguir la custodia exclusiva de los niños.

De cualquier manera, la clave será la existencia o no de un acuerdo prematrimonial entre los actores. Pitt y Jolie llevaban más de una década de relación pero tan sólo dos años casados. De haber convenio la pareja solo tendría que discutir el reparto de la fortuna generada en este último tiempo. Según la revista Forbes, los conjuntos activos de Pitt y Jolie ascienden hasta los 117,5 millones de dólares. De ellos, 76,5 habrían sido generados por Pitt.

La isla con forma de corazón que él le regaló a ella en 2013, ¿para quién?