Katy Perry ha sido una de las caras conocidas que más se ha visto durante la campaña de Hillary Clinton. La cantante ha concedido conciertos, ha dado discursos en actos de la campaña demócrata y ha compartido varias publicaciones apoyando a la candidata femenina.

Ahora, Katy Perry ha recibido el Premio Humanitario Audrey Hepburn de la mano UNICEF, y fue la propia Hillary Clinton quien le entregó el galardón a la cantante. Posteriormente, Perry le dedicó unas palabras muy inspiradoras a la excandidata demócrata e hizo una gran reflexión sobre el futuro del país tras la victoria de Trump.

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"Poco a poco, voy bajando de la hermosa nube a la que subí gracias a UNICEF la noche del martes. En primer lugar, estoy increíblemente agradecida por haber recibido el Premio Humanitario Audrey Hepburn a manos de mi heroína Hillary Clinton. Este premio será un recordatorio constante para poder salir de mi burbuja y volver a la batalla para iluminar los asuntos que más importan, especialmente para iluminar la difícil situación de los niños vulnerables con grandes necesidades y que viven sin los derechos humanos básicos. Este premio es un punto de partida, no una meta, y estoy emocionada por el lugar al que me lleva mi nueva ambición.

Me sentí profundamente conmovida y sorprendida cuando Hillary apareció para darme este premio. Me puse a llorar cuando la vi subir al escenario. La última vez que estuve con ella fue en Nueva York, durante la noche de las elecciones. Me quedé cubierta por un manto de tristeza y desesperación porque para mí, imagino que igual que para otros, los resultados desencadenaron una gran cantidad de temores y emociones. Me temía que nunca íbamos a volver a ver la luz de la justicia. Me sentía vulnerable, confundida y asustada como una niña.

Desde fuera parece que siempre he tenido "voz". La verdad es que nunca me había sentido así hasta el año pasado. Encontré una nueva voz, una voz más decidida. Crecí protagida, reprimida y guardé silencio por temor a dar la respuesta equivocada. Simplemente estaba asustada. Hillary me ayudó a darme cuenta de que estamos todos juntos en esto, sin importar de dónde venimos, de qué color somos o la educación que tenemos o dejamos de tener. Hillary encendió un fuego dentro de mí que arde cada vez con más fuerza y más brillo, y ese fuego NUNCA se apagará. Los sentimientos de desesperación siguen llegando en oleadas, pero estoy más MOTIVADA que nunca para luchar contra la injusticia social y promover la igualdad y la bondad como mejor sé, a traves del arte y de mi infulencia. Me sigue inspirando su fuerza y su capacidad para seguir creciendo, como el Fénix que es ella.

Es curioso, a veces las personas que no están de acuerdo conmigo solo dicen: "Cállate y canta". Pero yo haré algo totalmente nuevo... el próximo año. El infierno no tiene tanta furia como una mujer RENACIDA".