ACTUALIZADO: El resultado del juicio de Kendall Jenner contra su supuesto acosador, Shavaughn McKenzie, ya es público. Sin embargo, no cumple con las expectativas de la modelo. McKenzie ha sido acusado por allanamiento, pero no por acoso, tal y como definió los hechos la pequeña de las Jenner-Kardashian. El abogado del acusado ha declarado: "Solo quería hablar con ella, no agredirle". Y continú, "este caso no es sobre acoso. Ni sobre allanamiento. Este caso es la criminalización de una enfermedad mental", según informa el diario El País.

Kendall Jenner ha testificado este jueves, en Los Angeles, contra su presunto acosador, que asaltó su propiedad este verano. Se trata Shavaughn McKenzie, que se enfrenta a un delito menor de acoso y violación del que Kendall es testigo clave, según cuenta el portal TMZ.

Kendall Jenner llegó a su casa el 14 de agosto, situada en Hollywood Hills y encontró a McKenzie frente a su entrada, con la cabeza entre las rodillas. Ella lo rodeó con el coche y cerró rápidamente la puerta. Sin embargo, McKenzie consiguió colarse una vez cerrada la puerta, y Jenner lo vio desde el espejo lateral coche.

Según TMZ, en el testimonio de Kendall la víctima contaba que gritó: "¿Quién eres?", y McKenzie se limitó a mirarla. Jenner se asomó a la ventana para exigirle que se fuera y, en ese moemnto, "comenzó a volverse loco, golpeando las ventanas", según informa TMZ.

Kendall Jenner testificó ante el tribunal: "Nunca, en mi vida, había estado tan asustada". Por suerte, fue capaz se salir de la vivienda y llamar a un amigo que estaba en la calle.

Parece que el clan Kardashian-Jenner está en el punto de mira de acosadores y criminales. Según fuentes cercanas a la familia, han ampliado el dispositivo de vigilancia tras el traumático asalto que sufrió Kim Kardashian tras el desfile de Chanel en París.