Paloma Chamorro estuvo ligada a la divulgación cultural y artística en televisión desde sus inicios. En la década de los 70 comenzó ya a trabajar en TVE, en programas como Galería (1973-1974), Trazos (1977), Encuentros con las artes y letras (1977-1978) o Imágenes (1978-1981). Todos estos programas de televisión se situaban en el ámbito cultural y literario y, en el último de ellos, Paloma Chamorro empezó a consolidar su carrera, gracias al contacto con grandes artistas, donde tuvo la oportunidad de entrevistar a figuras de la talla de Salvador Dalí o Joan Miró.

Sin embargo, Chamorro alcanzó la verdadera popularidad con el que fue uno de los programas musicales más importantes de la hidtoria más reciente. Por el momento en que se emitió, por su contenido transgresor y por la repercusión que tuvo. La edad de oro, un programa que se emitió entre 1983 y 1985 y que mostró un abanico de variedades musicales nunca vistos hasta el momento en la televisión nacional. El espacio se convirtió en un emblema cultural y musical porque suponía el mayor escaparate para grupos musicales y artistas y, Paloma Chamorro, en todo un icono de la movida madrileña.

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La edad de oro dio lugar a actuaciones y momentos impensables a día de hoy en un espacio televisivo. Se abrió al público por primera vez con la reunión de Kaka de Luxe y finalizó con la retransmisión en directo de The Smiths tocando en el Paseo de Camoens en Madrid. Paloma Chamorro acogió en su programa a los principales protagonistas de la movida como Radio Futura, Le Mode, Alaska y Dinarama, Los Rebeldes, Los Nikis, Loquillo y los trogloditas y un larguísimo etcétera. Pero este espacio televisivo también dio cabida a la música internacional, invitando a artistas de la talla de Lou Reed, The Smiths, Spandau Ballet, John Cale, Culture Club o Marc Almond.

Tras el cierre del programa en 1985 y una serie de acusaciones turbulentas a las que se enfrentó la presentadora por ofensas a la religión en dicho espacio, Paloma Chamorro siguió ligada al periodismo cultural a través de trabajos esporádicos, aunque alejada de la vida pública. Sin embargo, y pese a su pronta retirada del foco de la noticia, la figura de Paloma Chamorro supuso todo un icono en el ámbito cultural, por su actitud transgresora y su importancia en esa edad de oro musical en la capital española, donde Chamorro fue mucho más que una simple presentadora de televisión.