La trifulca arrancaba hace algunas semanas. Un ex empleado de Facebook abría debate en EE.UU. al acusar a la red social de suprimir de forma sistemática ciertas noticias de interés político. La web de tecnología Gizmodo recogía la denuncia del ex miembro del equipo de Zuckerberg y Facebook, al poco, negaba cualquier tipo de censura con rotundidad: “Tomamos las acusaciones de sesgo muy en serio (…) Esta es una plataforma para las personas y las perspectivas de todo el espectro político”.

A la queja del ex trabajador de la empresa se sumó también la del grupo feminista Cherchez la Femme. Jessamy Gleeson, portavoz de la asociación, advertía ayer mismo que Facebook había censurado una imagen publicitaria (arriba) por, según el personal, “mostrar partes del cuerpo de forma poco deseable”.

Gleeson denunciaba lo ocurrido de inmediato y Facebook se disculpaba por ello: “Hemos ignorado algo importante: el concepto de cuerpo positivo con independencia de la talla. Actuar en este tipo de situaciones no es fácil y hemos llegado a la conclusión de que no queremos hacer que las mujeres se sientan mal consigo mismas por algo así”.

Con la polémica publicidad de vuelta, Facebook acaba de cambiar su módulo de tendencias tras las críticas recibidas.

A partir de ahora la web incluirá la eliminación de una lista de diez páginas web, más formación y una guía más clara que ayude a los editores a evitar cualquier clase de sesgo, sea político o ideológico. El nuevo módulo de tendencias de la red “será revisado exhaustivamente” cada poco.