Famosos y comida rápida: una (suculenta) historia de amor

En los Globos de Oro de 2014, y en pleno apogeo de su carrera por la siguiente suprema del aquelarre de American Horror Story: Coven, Emma Roberts (Nueva York, 1991) no se lo pensó dos veces cuando el carrito de hamburguesas In-N-Out, que toda entrega de premios de bien en Hollywood requiere, gritaba desde la lejanía bajo el sonido de un grito ahogado: "cómeme, cómeme". Así que Emma decidió que era un buen momento para abrir Instagram.

¿Y quién es quién para autonegarse unas palomitas bañadas en mantequilla? Otra habitual del aquelarre de Ryan Murphy en American Horror Story, Chloë Sevigny (Springfield, 1974), de Asylum al próximo Hotel, no lo dudó aquella vez que quedó con una amiga para disfrutar de unas buenas entradas en un partido de baloncesto. Y son sus caras las que piden gracias al Dios de las palomitas por salvarlas de aquel infierno.

Y seguro que alguna vez has sobrevivido a una cola infernal de hora punta en un restaurante de comida rápida. Chloë Grace Moretz (Atlanta, 1997) lo pudo contar después de la premiere de su remake de Carrie. Así que, probablemente esa larga espera en el In-N-Out fuera un castigo por perpetrar aquel atentado cultural. Cosas del karma.

O como cuando Rita Ora (Kosovo, 1990) se encontró un día con la nevera vacía y se disfrazó de dólar americano para salir a por comida de manera urgente. Y qué contenta volvía a casa.

Y viene Cara Delevingne (Londres, 1992) a romper mitos de modelos posando junto a su McDonald's para llevar y su amiga Jourdan Dunn (Londres, 1990) aquella vez que les quedaban horas para desfilar en la London Fashion Week de 2013. Y al igual que tú, revolucionaron Instagram al subir una foto tan controvertida. ¿Para qué está si no?

Ahora que levante la mano quien no haya tenido alguna vez antojo de pollo frito del KFC. Eso le pasó a Selena Gomez (Texas, 1992) –el Gomez de Selena no lleva tilde– cuando le pilló por sorpresa este vaivén en su vida. La aventura dio lugar a su último hit: El corazón quiere lo que quiere. Y qué angustia cuando la canta.

Y es ese tomate cherry el que, como a Drew Barrymore (California, 1975) a la salida de los Globos de Oro de 2014, te puede alegrar una porción de pizza. Ese día, Drew no escatimó en ingredientes extra, y qué feliz estaba con su pizza.

Jennifer Lopez (Nueva York, 1969) sabe aprovechar muy bien las infinitas posibilidades que un Papaya –cadena neoyorkina abierta 24 horas con zumos de fruta, perritos calientes y huevos revueltos por poco más de un dólar– te puede ofrecer en plena madrugada de un sábado cualquiera. Por eso, en El plan B, su película de 2010, JLo viene a dejar claro que un poco de comida rápida te puede salvar hasta una cita. Y qué razón tiene.

Un consejo que no se debería seguir es el de Audrina Patridge (Los Ángeles, 1985) que cuando su propio spin-off de The Hills, costeado por ella misma y de nombre homónimo, fue cancelado después de una temporada se lanzaba con nervio a un kebap sin percatarse de que algo parecido a papel albal habitaba en su interior. Cuidado con la ansiedad, a veces puede generar problemas. Pero qué bien se quedó.

Al parecer, "¿De qué color es el vestido?" fue el juego favorito de Jennifer Garner (Houston, 1972) en la pasada temporada de invierno, así que una vez a la semana disfruta de este "¿Lasaña o pizza?" que tan poca gracia le hace ya a Ben Affleck. Pero qué bien se lo pasa.

Como Hilary Swank (Nebraska, 1974), que acababa de ganar su segundo Oscar por Million Dollar Baby en 2005, pero sigue siendo la prima del pueblo a la que ves cada ocho años excluida de la sociedad. En este caso, Hilary rechazó su In-N-Out y terminó en el Astro Burger de West Hollywood en el intento fallido de huir de las cámaras y no sociabilizar. Y qué mal le salió la jugada a Million Dollar Burger.

De todas maneras, seguro que más de una vez no has podido esperar a llegar a casa cuando, después de salir de fiesta, vuelves con un menú debajo del brazo. Eso fue lo que vivió el director de Brokeback Mountain a la salida de los Oscar de 2013 cuando se tropezó con el ya omnipresente carrito del In-N-Out. Y qué feliz estaba Ang Lee (Taiwan, 1954) con su Oscar por La vida de Pi y su comida.

Y cuando un buen contribuyente a la ciudadanía publicaba esta instantánea, en su cuenta personal de Twitter, de Kanye West (Atlanta, 1977) recargando energía en un restaurante Wendy's de Philadelphia y Kim Kardashian (Los Ángeles, 1980) jugando al Candy Crush, para analizar sociológicamente las relaciones de pareja en el siglo XXI: "Deja el móvil" "Kanye y Kim lo hacen".