Es la era del feminismo en Hollywood. Ver a actrices y modelos reivindicando los derechos de las mujeres, la igualdad salarial, la conciliación y condenando el machismo en cada acto público o en cada visita a las redes sociales se ha convertido en algo habitual. Sin embargo, pocas alzan la voz para contar un acto de machismo en primera persona. Pocas, pero Anne Hathaway lo ha hecho.

Es uno de los rostros del movimiento feminista (muchas veces en la sombra), encargada de reivindicar la igualdad de las mujeres, especialmente, en su ámbito de trabajo: la industria del cine. Sin embargo, parece que no siempre ha hecho visible ese apoyo al género femenino en Hollywood, o así lo ha reconocido en una entrevista para ABC News.

El presentador de la cadena, Peter Travers, le preguntó si podía decir alguna película de la que hubiese aprendido en especial, y ella se decantó por One Day. En esa película, reconoce, no dio todo lo que debería por la directoria Lone Scherfig, y cree que pudo ser por el simple hecho de que era una mujer. "Realmente lamento no haber confiado en ella desde el principio", cuenta. "Y a día de hoy me aterroriza pensar que la razón por la que no confié en ella, como hago con otros directores con los que trabajo, es que fuera una mujer".

La actriz no se esconde a la hora de reconocer una actitud machista en el pasado, y revela la vergüenza y la rabia que le provoca haber tenido ese comportamiento. "Me da mucho miedo haberla tratado de forma machista", continúa hablando de la directora de cine; "Me da miedo no haberle dado lo que necesitaba o... haber sentido algún tipo de rechazo hacia ella. Es algo sobre lo que he pensado mucho últimamente, cuando veo que llegan hasta mí guiones escritos por mujeres".

Sin embargo, el valor de la actriz para reconocer algo así, puede que sea un paso más en el proceso de reconciliación entre nosotras mismas. "Me da mucha vergüenza hablar de esto, y puede que parezca una confesión, pero creo que es algo de lo que debemos hablar", añade. "Este viaje es mucho más duro de lo que debería ser. No es igual para todos", cuenta en su discurso. Y culmina el alegato feminista: "Y me pregunto si es por culpa de pensamientos como el que acabo de relatar. Por restar valor a lo que le cuesta a una mujer hacer su primera película".