A estas alturas del año, a escasas semanas de poner rumbo a lucir palmito durante las vacaciones, uno de los hechos que más nos ha llamado la atención está relacionada con una de las partes de la anatomía femenina que más llama curiosidad despierta: el pecho. Y más concretamente, en los pezones, esa parte de nuestra fisionomía tan necesaria pero tan perseguida en estos tiempos.

Cuando parecía que el 'free the nipple' había acabado con las restricciones puestas en Instagram a las fotos en las que se ven pezones, cuando creíamos que los movimientos a favor de la lactancia natural estaban acabando con los prejuicios aún existentes en torno a amamantar a los hijos en público, resulta que la reducción de pezones se ha convertido en una de las cirugías más demandadas de lo que llevamos de 2017, por lo menos en Reino Unido.

Sí, has leído bien; se llevan los pezones pequeños. ¿Es esta tendencia un reflejo de la censura a la que se los ha sometido en los últimos años? Quizás el cierre de las redes sociales de famosas y anónimas que han compartido alguna foto en la que se ve pezón ha tenido algo que ver, pero nunca lo sabremos de forma segura. Lo que sí es cierto es que la clínica Plastic Surgery Group publicó el pasado mes de enero un resumen de sus predicciones para las tendencias en lo que a cirugía estética se refiere y en 2017 han podido percibir un aumento en el número de mujeres de demandan una reducción de pezones. "Encontramos que los pacientes con pezones de tamaño más pequeño tenían un mayor atractivo que aquellos que tenían pezones más grandes", declaran desde PSG.Ya en 2016 "hubo un aumento del 30% en las mujeres que solicitaron un tamaño de pezón más pequeño”, según su informe, en el que además esperaban un aumento mayor en 2017.

En nuestro país, por ahora, la cirugía de aumento mamario continua siendo la más demandada. “Según la SECPRE, la cirugía de aumento de pecho supone el 25% del total de cirugías estéticas que se realizan anualmente en España y supone más de 16.000 operaciones al año”, nos explica la doctora Josefina Royo De La Torre, directora del Instituto Médico Láser.“En segundo lugar, y muy cerca se encuentra la liposucción y sus variantes como el lipoláser. En cuanto a la cirugía de areola y pezón, tiene bastante demanda”. Pero no podemos dejar de preguntarnos cuáles son los motivos que llevarían a una mujer a reducir el tamaño de sus pezones.“Puede ser necesaria por diferentes motivos”, explica la doctora Royo. “Por una dilatación excesiva de areola, que aparece con frecuencia después del embarazo y la lactancia. La demandan pacientes con mama tuberosa, por tamaño excesivo del pezón, bien por ser demasiado elongado o por tener un diámetro excesivo. También por reconstrucción mamaria, o pacientes con pezón invertido”, nos cuenta.

Problemas fisiológicos a parte, lo que realmente nos perturba es que, a diferencia del ab crack y otras modas estéticas, ésta es completamente inalcanzable sin pasar por quirófano. Y aún así, parece ser que la sociedad sigue decantándose por un modelo de cuerpo femenino claramente inalcanzable. Visto lo visto, lo de banearle la cuenta de Instagram a Rihanna o los insultos a las mujeres que amamantan a sus bebés en público era la punta del iceberg de algo mucho más complejo en torno a esta parte del cuerpo femenino, que a partir de ahora, cuenta con otro parámetro bajo el que ser juzgado.