Quitarse el sujetador se ha convertido en una tendencia que va más allá de un simple hashtag en Instagram. Elfamoso ‘free the nipple (liberar los pezones) comenzó con una rebelión feminista en las redes sociales contra la censura de plataformas como Instagram, que permitían las fotografías de pezones masculinos pero eliminaban directamente las imágenes en las que apareciesen pezones femeninos. Pero poco a poco la moda saltó de la realidad virtual a las calles,y prescindir del sujetador se convirtió en algo casi tan común como llevarlo puesto.

Chiara Ferragni, Kendall Jenner o Emily Ratajkowski son solo algunas de las que se han convertido en abanderadas de esta tendencia. Bien sea por moda, o por una cuestión de rebelión feminista, estas chicas tomaron el relevo de otras como Kate Moss o Jennifer Aniston, que en los 90 también decidieron quitarse el sujetador. Y en las alfombras rojas, Suki Waterhouse, Cara Delevingne, Bella Hadid y una infinidad de nombres más decidieron hace tiempo que los sujetadores, bra, y otras prendas imposibles que pongan el pecho en su sitio, pero no se vean a través de las telas transparentes y grandes aberturas de sus vestidos, era algo que ya no iba con ellas.

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Sin embargo, ante esta tendencia en alta, son muchas las voces detractoras que se oponen a la moda de no llevar sujetador. Frente a la comodidad, la rebelión feminista o, simplemente, la decisión de ir como a una le da la gana, alzan la voz empresas de lencería, médicos especialistas o cirujanos que hablan de los efectos negativos que puede causar el hecho de prescindir de esta prenda de lencería. Aunque, por supuesto, también los hay que hablan a favor de esta tendencia, y aseguran que puede tener beneficios tanto en el aspecto físico como en el estado de salud de los senos femeninos.

Pero, ¿qué hay de cierto en todos los mitos que rodean la tendencia de llevar o no llevar sujetador? La dermatóloga Josefina Royo nos habla de una gran controversia al respecto en el ámbito médico-estético aunque, asegura, existen muchos mitos sobre los efectos por llevar o no sostén. De hecho, nos habla de dos importantes estudios llevados a cabo por doctores de prestigio como el Dr. Broumad (cirujano plástico de Nueva York), cuya teoría afirma que los elementos fisiológicos de sostén de la mama trabajan y mantienen un tono trófico mayor si no se usa sujetador y que la piel produce más colágeno.También destaca el estudio que llevó a cabo el Dr. Rouillion, de la Universidad de Bescanson que, tras observar la evolución del pecho femenino durante años, concluyó que las pacientes que no usaban sujetador tenían el pecho mejor, más tonificado y con la altura del pezón algo más alta.

En la práctica, como ocurre con casi todo, no se puede generalizar y los efectos en el pecho de llevar o no sujetador pueden depender de muchos factores, como el tamaño o la actividad a realizar. "Lógicamente, con unas mamas más grandes y si se va a realizar deporte tipo running es interesante llevar sujetador. Las mamas se desplazan en sentido vertical más de 6 cm cuando corremos y con el pecho sujeto la mujer suele correr más cómoda.En mamas grandes y pesadas, en teoría, el sujetador mejora en parte las molestias dorsales y lumbares del aparato locomotor", nos cuenta la doctora Josefina Royo de la Torre. Y añade: "Desde el punto de vista estético, en pacientes con pecho pequeño es más fácil que éste se mantenga más erguido y que el ángulo que hace la mama con la parrilla costal sea mayor y, por tanto, el aspecto del pecho sea más estético. En un pecho algo caído, el aspecto de la mama más erguida que aporta el sujetador da una imagen más juvenil que el pecho apoyado en el tórax".

Se elija o no llevar sujetador en el día a día, es una elección muy personal que debe ir con la comodidad o convicción de cada una. En lo que sí hace hincapié la doctora Royo de la Torre es que, en el uso diario de esta prenda, deberíamos optar por lencería hecha a base de productos naturales como el algodón, para que sea más compatible con la piel y "evitar prendas muy apretadas para no generar el exceso de compresión en el sistema linfático y permitir la liberación de toxinas". En este sentido, cada vez son más las marcas nuevas (o antiguas que apuestan por un nuevo modelo de negocio) que lanzan prendas cómodas y agradables para la piel, en las que predomina el confort y el bienestar de la mujer por encima de la estética. Suelen ser piezas con tejidos orgánicos, libres de costuras y cuya fabricación ha seguido un proceso responsable.

Maripuri Tijeritas es una de esas firmas. Es española, hace producción local y su fundadora, Garbiñe Tolosa, asegura que comenzó con el proyecto por pura necesidad, en búsqueda de ropa interior cómoda y sostenible. Sus diseños están hechos con materiales orgánicos y prescinden de costuras molestas. Nude Label, Owl Underwear o Reset Priority son otras de las nuevas firmas que comparten los valores ya mencionados, respetando la piel, el bienestar femenino y el medioambiente. Entre las más conocidas, destaca Lonely Girls, famosa por sus campañas con las actrices Lena Dunham, Jemima Kirke y el resto de actrices de la serie Girls, y por intentar transmitir el amor propio y la ruptura de estereotipos con sus diseños.

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En el debate abierto de si es mejor o peor llevar sujetador, sigue habiendo opiniones encontradas. Tal y como nos explica la doctora, "hay médicos que consideran que no emplear sujetadorhace que los músculos trabajen más ,y por tanto, la mama tienda a mejorar su aspecto en lugar de caerse. El otro grupo opina que la delicada estructura anatómica que funciona como sostén natural en el pecho es demasiado débil para aguantar el peso de la gravedad del pecho y que es más fácil que el pecho se caiga si no se usa sostén". La especialista, Josefina Royo de la Torre, concluye que la situación intermedia podría ser la más favorable, que es utilizar un sostén adecuado, que cuide la piel y la estructura de nuestro cuerpo de día, y prescindir de él durante las horas de sueño.