El verano tiene muchísimos beneficios para la piel. Entre otras cosas, los rayos de sol liberan las endorfinas y nos sentimos pletóricos. Sin embargo, nuestra piel es, normalmente, la gran damnificada por los excesos estivales y suele encarar el otoño con buen color pero deshidratada y con alguna mancha que otra. Esto es lo que los expertos denominan 'efecto rebote' estival o lo que es lo mismo, pasar del bienestar a una situación menos feliz (estéticamente hablando).

Para combatir estos efectos, que no siempre se manifiestan igual en todas las mujeres (hay quien puede salir airosa), dos expertos nos cuentan cuáles son los tres tratamientos más efectivos y demandados.

En este ranking, figura en primer lugar el peeling químico. Según los expertos, su demanda aumenta en otoño un 40% ya que favorece la eliminación de células muertas y manchas, y mejora la luminosidad. “El peeling químico consiste en la aplicación de un agente químico irritante o cáustico en las capas de la epidermis con el objetivo de favorecer su sustitución por otras capas de mejor calidad y textura. Tras el tratamiento, es imprescindible la protección solar y evitar la exposición directa al sol. De ahí que el otoño y el invierno sean las épocas perfectas para someterse a un peeling. Además, aconsejo esperar al menos 30 min para maquillarse, para que el pH de la piel se normalice”, explica el doctor Ángel Juárez, jefe de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora del hospital de la Zarzuela.

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Para la deshidratación, el doctor recomienda el uso del ácido hialurónico combinado con vitaminas a, b, c, e; aminoácidos, y antioxidantes. Una combinación apta para combatir la falta de firmeza y densidad de las pieles 'maltratadas' por el sol. “El ácido hialurónico es una molécula que está presente de forma natural en nuestro organismo y que 'sujeta' la dermis al tiempo que preserva la hidratación y elasticidad cutáneas", explica el doctor Juárez.

En tercer lugar, se encuentra uno de los tratamientos con más demanda en el mundo royal, de doña Letizia a Charlene de Mónaco: la mesoterapia facial. Esta terapia se centra en la microinyección de sustancias activas en el tejido mesodérmico y sus resultados son especialmente buenos en escote, manos y cuello. La mesoterapia se emplea principalmente para prevenir y tratar el envejecimiento facial, así como para luchar contra la deshidratación, gracias a sus sustancias activas hidratantes desde dentro”, explica Gloria Santomauro, directora del del Centro Médico GS. En esta misma línea, el doctor Juárez nos habla de la mesoterapia virtual, una alternativa a la tradicional, que no requiere inyecciones e ideal para favorecer la tersura cutánea y paliar la deshidratación. "Su tecnología se basa en la electroporación por ondas electromagnéticas que, durante unos segundos, alteran las membranas celulares para que los principios activos (vitaminas, aminoácidos, coenzima Q10 y ácido hialurónico) penetren en las células", matiza el doctor Juárez.