¿Recuerdas ese color naranja que se queda impregnado en tus dedos después de atacar con pasión una bolsa de gusanitos? ¿Te imaginas ese color convertido en maquillaje? Pues Cheetos, sí, la conocida marca de snacks, ha lanzado una colección de regalos para esta Navidad entre los que incluye unos polvos bronceadores color gusanito.
“El color del queso, el resplandor del sol. Hemos reunido lo mejor para manchar elegantemente la piel, para darle un brillo vibrante de Cheetos”, reza la web del producto. Se trata de una polvera redonda, que al abrirla descubre unos polvos compactos de un intenso color naranja. Realmente, por lo que hemos podido ver en algunas reviews de estos polvos hechas por youtubers, más que delante de polvos, estaríamos ante una textura algo más cremosa que pigmenta ligeramente cuando se utiliza en seco, pero que proporciona un intenso color naranja cuando se humedece un poco.
Así a simple vista, acabar con un bronceado a lo Donald Trump puede parecer la pesadilla de cualquier mujer, pero lo cierto es que el éxito del producto ha sido tal, que ya está agotado en la web de Cheetos. No sabemos si será el típico regalo para hacer la gracia o si la influencia del pensamiento del futuro presidente ha calado también en el imaginario estético del pueblo norteamericano, pero lo cierto es que nos hemos quedado impactados con su aceptación por parte de los consumidores. El director de marketing de Cheetos, Ryan Matiyow, en una entrevista a Mashable afirmó que la marca lanza esta colección de Navidad como una forma de combatir los regalos "sin inspiración”. "Este año, hemos tratado de cambiar eso mediante la creación de una colección de artículos verdaderamente únicos que con el espíritu divertido de la marca Cheetos a través de una variedad de categorías". Además de los polvos bronceadores, la colección incluye un perfume con aroma a Cheetos con queso, un papel higiénico naranja, un pañuelo de seda naranja y hasta joyas.
Visto lo visto, hemos querido ir un paso más allá y hemos hablado con Baltasar Gómez Pinel, Director of Makeup Artistry de MAC Europa, para saber si realmente podemos sacarle algún partido a un producto que nos produce tanto respeto y parece ser que sí. “Por loco que nos parezca, el color mandarina, el melocotón o los naranjas subrayan el tono saludable y nos aleja de parecer una corteza seca de corcho”, nos cuenta Baltasar. “El secreto está en cubrir ligeramente las mejillas y las áreas alejadas del centro del rostro, como las sienes y el mentón”, pero evita siempre las zonas centrales del rostro. “Acercarlos demasiado a los ojos puede producir el efecto Trump”, comenta Baltasar. “Se trata de calidecer el bronce de la piel para pasar de un chicharrón marbellí ochentero a un feliz y deportivo Cheeto. Ambas cosas suenan fatal, ¡pero el segundo está más rico!”
